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Cuerpos extraños y atragantamientos:
Para evitarlos: Hay que tener cuidado con objetos pequeños y moldeables que puedan meterse en oído, nariz o boca. Debemos tener precaución con las bolsas de plástico que puedan ponerse en la cabeza y debemos acostumbrarles a masticar bien para evitar atragantamientos.
Cómo actuar: Si el cuerpo extraño se encuentra en la garganta le pediremos que tosa fuerte, sin dar golpes y sin intentar sacar el objeto con nuestras manos. Si no puede respirar, lo rodearemos con los brazos, poniendo la mano cerrada justo por encima del ombligo y colocaremos la otra encima, realizaremos varias presiones rápidas y vigorosas, hacia arriba y hacia dentro. Si conseguimos que salga el cuerpo extraño pero el niño no tiene respiración debemos iniciar el boca a boca.
Es importante que ante cualquier tipo de accidente mostremos una actitud tranquila, pausada, que le transmita al niño afecto y seguridad, que le relaje. Luego analizaremos la situación y evaluaremos los síntomas y, si es necesario, acudiremos al centro de salud más cercano.
Heridas:
Para evitarlas: Debemos proteger las esquinas y los salientes de ventanas, puertas y muebles, retirar aquellos objetos punzantes o cortantes de su alcance y proteger las puertas para evitar que se pillen los dedos.
Cómo actuar: Hay que lavar la herida con agua y jabón o con suero fisiológico a chorros para arrastrar la suciedad y taponar la herida. Si la herida está en una extremidad hay que elevarla por encima de la altura del corazón para que deje de sangrar.
Después de un largo proceso para ser mamá soltera (6 IAD y 1 FIV) por fin bebé pingüino llegó para acompañarme en esta aventura mágica que es la maternidad. Blog sobre mis experiencias como mamá primeriza, desde la perspectiva de una mamá soltera por elección.