Literatura BDSM La Sumisa Insumisa ( Rosa Peñasco ) | Page 93
darte mi teléfono. En todo caso podría darte el número, ¿no?
—Ya estamos de chiste...
—Vale, apunta: 634 27 86 0
—Me falta uno...
—¡Claro! ¿No eras Sapiens? ¡Pues nada, AMO, a averiguar el que falta!
—¿Estás segura? Mira que tendré que castigarte por esto, ¿lo sabes, no?
—Pues AMOrdázame si quieres, pero pronto empezAMOs... A ver, te doy una
pista para que el castigo sea leve: el 0 no cuenta. Adiós.
Lo siguiente fue leer en mi Messenger insultos varios, a los que pronto se unieron
comentarios como: Grrrrrrrrrrrrr, son nueve posibilidades y mal empiezo: el 1 es un tío.
Mierda: el 2 está fuera de cobertura. ¡Joder!: en el 3 salta un contestador. ¡Qué mala
suerte!: el 4 es de una señora mayor... ¿Será posible?, el 5 es otro tío. Te vas a enterar,
zorra: el 6 es un número que no existe... Tengo un presentimiento: vas a ser el 7, estoy
seguro, vas a ser el 7. Además, el 7 es mi número preferido...
En ese momento sonó mi teléfono y casi me dio un vuelco cuando escuché su
voz:
—¿Marta?
—No, lo siento: se ha confundido. No soy Marta —dije impulsivamente y sin
ánimo consciente de mentir.
—Perdone —zanjó con educación un contrariado Sapiens.
Aunque en realidad no mentí porque no me llamo Marta sino Paula, no sé por qué
hice aquello. Es posible que mi colegio interior me hiciese jugar de nuevo; es posible
también que esos nervios que me asaltaron al escuchar su voz, esa voz que me
resultó cálida y tierna a la vez, me bloquearan haciéndome decir que no era Marta.
Ni lo supe, ni lo sé. Sólo sé que en mi Messenger podían leerse todo tipo de sapos y
culebras, aunque algunos sapos, y más de una culebra, me gratificaron mucho:
¡Qué lástima!: espero que tú tengas una voz tan bonita como el 7. Hummmmmmmmm,
¡qué voz tenía el 7! Hummmmmmmmm: Qué ganas de follar con el 7. Sigamos... Joder:
otro sin cobertura. Sólo me queda el 9, Marta: ¡por cojones tienes que ser el 9!...
Grrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr, ésta me la vas a pagar: te juro, perra mía, que ésta me la
vas a pagar... El 9 tampoco es: Joder... Tengo el látigo que echa humooooooooooooo.