Literatura BDSM La Sumisa Insumisa ( Rosa Peñasco ) | Page 59

máxima capacidad de estirarse y expandirse, tanto que parecían volverse elásticas las comisuras de mi boca. —¡Eso es, perrita! A tu AMO le encanta cómo utilizas la boca y, de un momento a otro, notarás cómo te lo agradece en esas hermosas caderas que veo desde aquí. Vamos: ¡no pares! Sin dejar de esmerarme en la felación y cuando estaba absorta entre las salidas y entradas de mi boca de ese capullo a punto de reventar, me distrajo de ese afán el hecho de sentir, de golpe, cómo VV