Literatura BDSM La Sumisa Insumisa ( Rosa Peñasco ) | Page 56
física, costumbres, aparatos variados, invitaciones a fiestas BDSM, rituales a seguir
y hasta bodas con vestidos de época entre AMOS y sumisas... Todo era motivo de
aprendizaje y de broma:
—Ya te veo, ya... Te imagino como a uno de esos médicos antiguos que iban de
casa en casa —le dije.
—¿Por qué?
—Porque es inevitable que acudas a ver a «tu sumi» con un maletín lleno de
juguetitos y aparatitos extraños...
—Jajajajajajajajaja. Mi niña, con un maletín no tengo ni para empezar. Lo mío es
una maleta, pero no te preocupes por el peso: tiene ruedas...
—Vale, AMO, me has planchao..., me has planchaooooo...
Entremedias, por no faltar, no faltaron los flirteos ni los sueños eróticos que
AMOSAPIENS confesó tener conmigo:
—Te diré por qué sé que tú, y sólo tú, debes ser y serás mi sumi.
—¿Por qué? —le pregunté expectante.
—Porque siento que necesito estar contigo. No sé si es atracción o cariño, eso lo
dirá el tiempo, pero sé que algo se está moviendo en este corazoncito.
—Hummmmmmmmm. Yo también te tengo mucho cariño, de verdad.
—Mira: aún no sé con e ᅍѥ