Literatura BDSM La Atadura ( Vanessa Duriés ) | Page 9

9 coacciones que son fruto de una educación demasiado represiva. Digamos que, en esos momentos, soy yo sin ser yo. Para ser sincera, creo que esa especie de esquizofrenia me permite liberar ciertas pulsiones reprimidas. Y el doble juego desculpabiliza. Soy una persona reservada. Mis amigas saben que soy tímida e insegura pese a lo mucho que me atraen ciertas aventuras. Hasta que conocí a Pierre, me costaba imaginarme en situaciones que se me antojaban escabrosas, y, por ejemplo, jamás me habría atrevido a hacer de prostituta. Me habría negado a ello arguyendo que ese papel no casaba del todo con mis fantasías. Pero mis experiencias con Pierre me han enseñado que, si bien era incapaz de convertirme en una buena y auténtica puta, aceptaba gustosamente interpretar ese papel para que mi amante gozara. Verlo enorgullecerse de mi sumisión me procuraba una exaltación rayana en el placer físico. ¿Se trataba únicamente de experimentar la satisfacción del hombre amado? ¿O es que el hecho mismo de entregarme sin condiciones a un tabú social para transgredirlo, con la coartada de gustar a mi amante y de estar cumpliendo una orden suya, me procuraba sensaciones inauditas? ¿Era la humillación que sentía al verme tratada como una putita lo que me proporcionaba ese placer?, ¿O era la maravillosa posibilidad de evadirme a un universo en el que jamás me habría atrevido a adentrarme sola, sin Él? He aprendido a gritar bien alto que soy una puta y una perra cuando un perfecto des-conocido me posee delante de mi Amo. Proclamo entonces que soy una zorra, y no cabe duda de que lo soy cuando realmente me apetece. Actuar en armonía con mi instinto de hembra me proporciona un placer infinito, sobre todo cuando sé que mi Amo está atento a la menor caricia ya la menor humillación que me infligen los hombres a quienes me obliga a entregarme. Una de las mayores dichas de la vida estriba en poder acabar con los tabúes que anidan en nuestro interior. No conozco nada más enriquecedor para el conocimiento de uno mismo que alcanzar ese objetivo.