Literatura BDSM La Atadura ( Vanessa Duriés ) | Page 15
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Un hombre cuyo rostro no pude ver se di rigió a ella tildándola de «saco de lefa».
Más tarde me enteré de que la joven estaba allí en calidad de receptáculo del semen de
los amo y que tenía la obligación de recibir a éstos, si protestar ni exteriorizar siquiera
sentimiento alguno, por todos los orificios con que la naturaleza nos ha dotado. Era
una mujer rebajada al rango de objeto mudo y servil.
A pesar de todo, me di perfecta cuenta de una cosa que dejaba indiferentes a los
demás, participantes. «Número 7» estaba al borde de las lágrimas y sus bonitos labios
temblaban de emoción.
Entonces, uno de los hombres, mientras le acariciaba la hermosa nuca, que se arqueó
bajo la caricia, le murmuró al oído que tenía que utilizar como le viniera en gana a la
bella y joven virgen que yo era todavía.
Yo no tenía entonces la menor experiencia homosexual y la idea de mantener
relaciones físicas con una mujer, aunque fuera joven bonita, me inspiraba cierta
repugnancia. Ella se echó a llorar de forma inexplicable, como si la mano del amo
hubiera desencadenado los sollozos que ahora sacudían a ese frágil cuerpo femenino
sometido a los caprichos de los hombres. Sentí lástima por ella, y el sufrimiento que
pude leer en ese momento en su mirada calmó mi angustia, de manera que yo también
me eché a llorar y ambas derramamos amargas lágrimas, la una frente a la otra,
ofreciendo un espectáculo tan insólito como intolerable para nuestros exigentes amos.
«Número 7» pareció calmarse. Rápidamente se recobró, adoptó una actitud más
digna y ocultó sus emociones hasta el final de la velada. Cuando partió, con un hombre
que la tomó por el brazo, me encontré sola, hostigada por la culpa y con la terrible
sensación de haber cometido una falta imperdonable que me privaría, quién sabe si para
siempre, de la consideración y del amor de mi Amo.
Mi penitencia en aquel húmedo sótano se prolongó más de tres horas, y mi
desasosiego y mi miedo no dejaron de ir en aumento. Fueron tres horas dolorosas y