Literatura BDSM Justine o Los Infortunios de La Virtud (Sade) | Page 78
cordero: «Para alimentarme», contestará. Unos lobos que comen corderos, unos corderos devorados por
los lobos, el fuerte que sacrifica al débil, el débil víctima del fuerte, así es la naturaleza, así son sus
opiniones, así sus planes: una acción y una reacción perpetuas, una multitud de vicios y de virtudes, un
perfecto equilibrio, en una palabra, resultante de la igualdad del bien y del mal en la Tierra; equilibrio
esencial para el mantenimiento de los astros, de la vegetación, y sin el cual todo sería inmediatamente
destruido. Oh, Thérèse, la naturaleza se sentiría muy sorprendida si pudiera por un instante razonar con
nosotros, y le dijéramos que esos crímenes que la sirven, que esos desmanes que exige y que ella nos
inspira, están castigados por unas leyes que se nos asegura que son la imagen de las suyas. Imbéciles, nos
contestaría, duerme, bebe, come y comete s [