Literatura BDSM Cincuenta sombras más oscuras | Page 72
Suspira, derrotado.
—Hizo un torpe intento de cortarse las venas.
—¡Oh, Dios!
Eso explica el vendaje de la muñeca.
—Gail la llevó al hospital. Pero Leila se marchó antes de que yo llegara.
Santo Dios. ¿Qué significa eso? ¿Suicida? ¿Por qué?
—El psiquiatra que la examinó dijo que era la típica llamada de auxilio.
No creía que corriera auténtico peligro. Dijo que en realidad no qu ería suicidarse.
Pero yo no estoy tan seguro. Desde entonces he intentado localizarla para
proporcionarle ayuda.
—¿Le dijo algo a la señora Jones?
Me mira fijamente. Se le ve muy incómodo.
—No mucho —admite finalmente, pero sé bien que me oculta algo.
Intento tranquilizarme sirviendo el té en las tazas. ¿Así que Leila quiere
volver a la vida de Christian y opta por un intento de suicidio para llamar su atención?
Santo cielo… resulta aterrador. Pero efectivo. ¿Christian se va de Georgia para estar a
su lado, pero ella desaparece antes de que él llegue? Qué extraño…
—¿No puedes localizarla? ¿Y qué hay de su familia?
—No sabe dónde está. Ni su marido tampoco.
—¿Marido?
—Sí —dice en tono abstraído—, lleva unos dos años casada.
¿Qué?
—¿Así que estaba casada cuando estuvo contigo?
Dios. Realmente, Christian no tiene escrúpulos.
—¡No! Por Dios, no. Estuvo conmigo hace casi tres años. Luego se marchó
y se casó con ese tipo poco después.
—Oh. Entonces, ¿por qué trata de llamar tu atención ahora?
Mueve la cabeza con pesar.
—No lo sé. Lo único que hemos conseguido averiguar es que hace unos
meses abandonó a su marido.
—A ver si lo entiendo. ¿No fue tu sumisa hace unos tres años?
—Dos años y medio más o menos.
—Y quería más.
—Sí.
—Pero ¿tu no querías?
—Eso ya lo sabes.
—Así que te dejó.
—Sí.
—Entonces, ¿por qué quiere volver contigo ahora?
—No lo sé.