Literatura BDSM Cincuenta sombras más oscuras | Page 203
tan segura de que no te pasará nada?
Está prácticamente gritando.
¿Qué quiere decir? ¿Acaso piensa mantenerme? Oh, esto es totalmente
ridículo. ¿Cuánto hace que le conozco… cinco semanas?
Ahora está muy enfadado. Sus tormentosos ojos centellean, pero no me
importa en absoluto.
—Por Dios santo, Christian, Leila estaba a los pies de tu cama y no me hizo
ningún daño. Y sí, yo necesito trabajar. No quiero deberte nada. Tengo que pagar el
préstamo de la universidad.
Aprieta los labios y yo pongo los brazos en jarras. No pienso ceder en esto.
¿Quién se cree que es?
—No quiero que vayas a trabajar.
—No depende de ti, Christian. La decisión no es tuya.
Se pasa la mano por el pelo mientras sus ojos me fulminan. Pasamos
segundos, minutos, sin dejar de retarnos con la mirada.
—Sawyer te acompañará.
—Christian, no es necesario. No tiene ninguna lógica.
—¿Lógica? —gruñe—. O te acompaña, o verás lo ilógico que puedo ser
para retenerte aquí.
¿No sería capaz? ¿O sí?
—¿Qué harías exactamente?
—Ah, ya se me ocurriría algo, Anastasia. No me provoques.
—¡De acuerdo! —acepto, levantando las dos manos para apaciguarle.
Maldita sea… Cincuenta ha vuelto para vengarse.
Permanecemos ahí de pie, fulminándonos con la mirada.
—Muy bien: Sawyer puede venir conmigo, si así te quedas más tranquilo
—cedo finalmente, y pongo los ojos en blanco.
Christian entorna los suyos y avanza hacia mí, amenazante. Inmediatamente,
doy un paso atrás. Él se detiene y suspira profundamente, cierra los ojos y se mesa el
cabello con las dos manos. Oh, no. Cincuenta sigue en plena forma.
—¿Quieres que te enseñe el resto del apartamento?
¿Enseñarme el…? ¿Es una broma?
—Vale —musito cautelosa.
Nuevo cambio de rumbo: el señor V
oluble ha vuelto. Me tiende la