Literatura BDSM Cincuenta sombras de Grey ( E.L. James ) | Page 352
A última hora de la tarde espero sentada y nerviosa al señor J. Hyde en el
vestíbulo de Seattle Independent Publishing. Es mi segunda entrevista de hoy y la
que más me interesa. La primera ha ido bien, pero era para un grupo mayor, con
oficinas en todo el país, y yo no sería más que una de las muchas ayudantes
editoriales. Imagino que semejante máquina corporativa me engulliría y me
escupiría bastante rápido. En SIP es donde quiero estar. Es pequeña y poco
convencional, aboga por los autores locales y tiene una interesante y peculiar lista
de clientes.
El lugar resulta un tanto austero, pero creo que es una declaración de
intenciones más que un indicio de frugalidad. Estoy sentada en uno de los dos
sillones Chesterfield de piel verde oscuro, muy similares al sofá que tiene Christian
en su cuarto de juegos. Acaricio la piel, apreciativa, y me pregunto distraída qué
hará Christian en ese sofá. Divago pensando en las posibilidades… no, más vale
que no piense en eso ahora. Me sonrojan mis pensamientos descarriados e
inoportunos. La recepcionista es una joven afroamericana con grandes pendientes
de plata y el pelo largo y liso. Tiene cierto aire bohemio; es de esa clase de mujeres
con las que podría llevarme bien. La idea me reconforta. De vez en cuando me
mira, apartando la vista del ordenador, y me sonríe tranquilizadora. Yo le
devuelvo la sonrisa tímidamente.
Ya tengo el vuelo reservado, mi madre está encantada de que vaya a verla, he
hecho la maleta y Kate ha accedido a acompañarme al aeropuerto. Christian me ha
ordenado que me lleve la BlackBerry y el Mac. Pongo los ojos en blanco al recordar
su despotismo, pero ahora me doy cuenta de que él es así. Le gusta controlarlo
todo, incluida yo. Sin embargo, también puede ser tan impred V6