RÉQUIEM
Cesar R. Angulo Barrientos
A un difunto
¿ De qué lloras, carne, si no has muerto? Con el viento de luto, no le pidas respuesta al duelo Pues oirás solo sus manos aplaudiendo en silencio Junto con sus palabras, sus formas y su aliento. Burlándose con sus propias sombras de secretos. ¡ Velorio pasado, por impuntualidad del muerto!. Ya no es secreto entre tantos testigos Que adornan al fantasma gris de estos días, Olvidaremos abril en fotografías y líneas De vez en mes prometo rosas si recuerdo Sin dirección exacta con el tiempo a tu nombre tejimos ambos, epitafio:“.. Te dejaste morir al silencio inoportuno, en el vacío error del momento agrio …”
Cruzando otra mirada quebrada de lejos. Deslicemos entonces sus guiños a otro camino. Sécate el brillo en los ojos con la distancia En tu tumba, unas preguntas últimas ¿ Qué se siente estar más allá, en otra vida? Si no contestas, déjame responderme en paz Con sentido pésame, ¿ qué se le hace? Huyeron las horas negras: Requiescat in pace.
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