Liderazgo y Experiencia Médica Edición 35 Octubre 2015 | Page 89
montada en un stent metálico que sirve
como estructura de sujeción del tejido
valvular. (Figura 1)
Fig. 1. Prótesis valvular aórtica
CoreValve. Se aprecia el tejido
valvar montado sobre un stent
metálico.
En sus orígenes era indispensable la
participación del cirujano cardiovascular
para poder llevar a efecto esta opción de
manejo, pues era obligatorio realizar un
abordaje quirúrgico de la arteria femoral
para que bajo visión directa se pudiera
introducir el sistema de entrega de la
válvula, pues el diámetro de los sistemas
de entrega de la válvula eran originalmente
24F.
Actualmente ya contamos con sistemas
con un diámetro de 14F, lo cual permite ya
que todo el procedimiento sea percutáneo
y ha facilitado el abordaje de los pacientes
al hacerlo menos invasivo. Inicialmente la
técnica fue probada en pacientes que se
consideraron inoperables, pero tras los
buenos resultados que se obtuvieron en
este grupo, se pasó a indicar en pacientes
de alto riesgo quirúrgico y actualmente los
estudios están abordando pacientes con
riesgo moderado.
Uno de los puntos que se cuestiona
actualmente es sobre la durabilidad del
tejido valvular protésico que se utiliza, pero
dado que el tejido valvular que se usa en
esta válvula es exactamente el mismo que
se utiliza en la válvula que pone el cirujano
en una cirugía de implante de prótesis
valvular, la expectativa y los resultados
hasta el momento actual tienden a
mostrar una durabilidad del tejido valvular
aceptable, al ser igual que la durabilidad
de la válvula quirúrgica.
La vía de abordaje es femoral en más
del 90 por ciento de los casos, pero para
aquellos casos en los cuales esta vía de
acceso no es disponible en el paciente
tenemos como opciones el abordaje por
vía subclavia y de no ser este posible
podemos utilizar el abordaje aórtico directo
mismo que implica la realización de una
miniesternotomía para abordar al paciente
directamente sobre la aorta ascendente,
bajo visión directa.
En los muy raros casos en los que el
paciente no tiene la posibilidad de ser
abordado por vía femoral, subclavia o
aórtica directa, tenemos la posibilidad de
abordar al paciente por vía transapical,
técnica que obliga a realizar una
mini toracotomía, así como una mini
pericardiectomía para exposición del ápex
ventricular izquierdo y realizar una punción
directa del musculo cardiaco, para a través
de ella lograr la colocación de una prótesis
valvular. (Figuras 2, 3, 4, 5, 6)
Está técnica es la menos utilizada, dada
su alta tasa de complicaciones y tasa de
eventos cardiovasculares mayores en
el seguimiento. Desde el punto de vista
técnico existen básicamente dos sistemas
de válvula aórtica percutánea, estos son la
válvula implantable por balón y el sistema
de válvula auto expandible.
En nuestro país los principales
representantes de estos sistemas son el
sistema Sapiens XT® de la casa Edwards,
para el sistema expandible con balón y
el Sistema CoreValve®, de la empresa
Medtronic, para el sistema autoexpandible
(Figura 7).
Colocación de prótesis
Fig.2. Momento de la liberación de una válvula
CoreValve por vía femoral;
3. Válvula CoreValve ya liberada en la posición
adecuada, siendo abordado el paciente por vía
transfemoral;
4. Abordaje aórtico directo para la colocación de
prótesis aórtica percutánea;
5. Inicio de la liberación de una prótesis aórtica
percutánea por acceso aórtico directo;
6. Prótesis valvular aórtica correctamente colocada, se
aprecia la suficiencia de la válvula.
UMAE Hospital de Cardiología CMN Siglo XXI, IMSS LATIENDO JUNTOS, A TODO CORAZÓN
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