ⓈⒶⓁⓊⒹ » Libro: Vive Sin Ansiedad PDF, Eric Gutiérrez | Page 18

Ahora, la adrenalina está bombeando realmente por su sistema, su cuerpo está sintiendo picazón con las sensaciones incómodas, y ahora la temida sensación de perder el control por completo sumerge sus emociones. Nadie alrededor de tiene idea del terror puro que está experimentando. Para ellos, es sólo un día regular y otra línea frustrante, lenta en la tienda. Comprende que usted carece de opciones. Es hora de correr. Usted se excusa de la línea pareciendo avergonzado mientras es su turno de pagar. El cajero está mirando confundido mientras usted deja sus compras atrás pasa hacia la puerta. No es momento para excusas - necesita estar solo. Deja el supermercado y se sube a su automóvil para manejarlo solo. Se pregunta si éste es o no el grande. Al que le teme le empujará por el borde mentalmente y físicamente. Diez minutos después el pánico se calma. Solo son las 11:00 de la mañana, ¿cómo en el mundo entero puede continuar con el resto de su día? Si usted padece de ataques de pánico o de ansiedad, el escenario arriba probablemente le suena muy familiar. Puede aún haber inducido sensaciones de ansiedad sólo por leerlo. En realidad, es difícil para mí sólo el hecho de escribirlo! Las situaciones particulares que desencadenan su pánico y la ansiedad pueden diferir. Quizá las sensaciones corporales son un poco diferentes. Lo que es importante de comprender es que los ataques de pánico son muy reales para las personas que los están teniendo y ellos nunca deben ser empujados a un lado. Recuerdo una tarde en la casa cuando estaba mirando uno de mis programas de televisión favoritos. Pensé que estaba en un lugar seguro. Allí no había ningún desencadenante obvio y me sentía completamente relajado. De la nada empecé a tener los síntomas de un ataque pánico. Las cuatro paredes de mi sala se estaba cerrando en alrededor de mi. No podía respirar y me sentí como estar muriendo. Salí a mi porche delantero para tomar aire fresco y comencé la respiración profunda como ejercicio. Los síntomas finalmente se fueron, pero ello me dejó preguntándose ¿por qué exactamente tuve ese ataque? No existía ninguna razón obvia, ninguna situación llena de tensiones, y ningún indicador de que un ataque pánico podría estar amenazando. Esa es la cosa extraña sobre el pánico. A veces su mente puede hacer suertes en usted. Aún cuando piensa que no corre ningún peligro de tener un ataque pánico porque está en casa, su cerebro podría estar sintiéndose diferente. Esa es la parte temerosa. La parte buena es que existen formas en que usted puede combatir los ataques de pánico y afrontarlos mucho mejor cuando se encuentre en esa situación. 17