EL ¡t.lPERIO INCAICO
11
ciones dictadas en la Universidad Católica en 1937 y reu-
nidas en volumen el mismo año, los ensayos sobre el 1m-
perio incaico publicados en sus Opúsculos (1937 y 1938),
particularmente el prólogo a la obra El Imperio Incaico del
Dr. Urteaga, su réplica a yonzales de la Rosa y algunas
reflexiones sobre la época española en el Perú.
La Historia en el Perú rectificó, en su época, muchos
Errores sobre hechos e instituciones que hoy se hallan incor-
porados a la estimativa general del 1ncario. Sostuvo -con
¡¡igorosos argumentos étnicos, filológicos y arqueológicos-
que la civilización y las instituciones incaicas, no fueron un
brote espontáneo y original, o invención incaica, sino culmi-
nación de la antigua cultura de 1iahuanaco, la que a su vez
recogió reflejos de culturas anteriores. Esa cultura fue obra
de los quechuas, primitivos pobladores de la región, los que
fueron desplazados por los aymaras y no por los ataca-
mefios, invasión destructora del Sur que partió en dos el
antiguo dominio cultural y lingüístico de los quechuas, in-
terponiendo una mancha aymara, que aún subsiste, entre
íos quechuas del Sur del Perú y del Sur de Bolivia y norte
argentino. Con apasionamiento dialéctico rebatió más tarde
la apología aymarista de Middendorf, Markham, Uhle, von
Buchwald y Latcham. ':Fue también Riva-Agüero el pri-
mero eH caracterizar dos claros períodos en la historia in-
caica, calificados hasta entonces indistintamente como 1m-
t,erio 1ncaico, distinguiendo una primera etapa de "con-
federación" o "liga quechua", capitaneada por los 1ncas de
J-lurin Cuzco, pero con cierta autonomía feudal de los aso-
ciados, y un segundo período, el del 1mperio conquistador
de los J-lanan Cuzco, con carácter centralista y unificador.
[n lo relativo a la orga