Libro digital 1 TOMO-5 | Page 172

144 JosÉ DE LA RIVA-AGÜERO que considera del todo independientes en su origen y fo- nética, tan sólo paralelas, con una analogía general y un mero préstamo de voces superficial y externo. Es ocasión de exclamar: concertadme esas razones. Una tesis devora por fuerza a la otra. Si los dos idiomas son en lo funda- mental y originario extraños entre sí, no puede hablarse de etapas comparativas en su evolución, ni de precedencia del uno respecto del otro, pues falta la común medida, y es absurdo computar la distancia a que se hallan de un tronco que en el supuesto no existe. Las observaciones y elementos en que estriba este contradictorio aparato, no pueden ser más frágiles. Una de las pruebas de la famosa independencia absoluta de las dos grandes lenguas andinas, consiste en que el pronom- bre quien se dice en quechua pi y en aymara ji. A esta cuenta, ningún parentesco reconocerá entre el griego y el latín, porque en primero