Libro digital 1 TOMO-5 | Page 150

122 JosÉ DE LA RIVA-AGÜERO héroe barbado de los Maya-quichés, fabuloso fundador de Mayapán y Chichen Itza. Este Huiracocha, supremo nu- men del Titijaja, creador de los hombres y de las estatuas de Tiahuanaco, tiene nombre quechua y no aymara. Las dos raíces, huira y cacha, son evidentemente quechuas Su más segura etimología es la metafórica dada por el sa- bio indígena Dr. Sebastián Barranca, lago originario o ger- minador. 2 En aymara mar o lago no se dice cacha, como en quechua, sino cota ¡ y así no se ha llamado jamás la antigua deidad. Sus títulos rituales, netamente quechuas, son 'Rui- racocha Pachayacháchij o 111a '1'ijci 'Ruiracocha. El nombre colla equivalente es Taupaca, Tahuacapa o Arnahuan, que corresponde, según las leyendas más autorizadas, a su hi- jo rebelde, a su criado infiel y enemigo, al encarnizado per- seguidor de sus obras y secuaces, cuyo camino hay que buscar hacia al sur, por el largo Aullagas, y las costas de Arica y Chile 14. Cuando Uhle afirma categóricamente, y contradicien- do anteriores conjeturas suyas, que el dios de la portada de Tiahuanaco no es el Huiracocha de los Quechuas 15, 13 Barranca, Etimologías (Bol. de la Soco yeog. de .cima, año de 1920). 14 A más de los textos de Cieza Véanse los de Las Casas, Antiguas gentes del Perú, 55 - 56; Pedro Sarmiento de Gamboa, Ristoria general 1ndica, Segunda parte, cap. 7; Y Calancha Corónica moralizada, Primera parte, pág. 337; Segunda parte, Ristoria de Copacabana, cap. XVII.-En las :Relaciones geográficas de Indias (tomo II), se da el nombre de TahnacaIpa a uno de los ríos que se unen con el de La Paz, y cuyo rápido descenso a los Yungas debió de suministrar elementos a la fábUla del hijo desobediente de Huiracocha, precipitado al abismo por su padre. 15 UMe, Origen de los 1ncas (Cong. Americanistas de Buenos Aires 1910, pág. 307) .-Compárese con el discurso de su recepción oficial en el Instituto Histórico del Perú (:Re.,. Ris., Lima, 1906 pág.420).-En cambio, el pasaje de Cieza que Uhle invoca (POSición bistórica de los Aymaras) relativo al nacimiento del Sol en el fondo del lago, y que debe de ser el del capítulo cm de la Primera Parte o el V del Señorío, no tiene el akance y significado que pretende atribuirle.- El Inca Garcilaso nos transcribe la relación de su condiscípulo el cura mestizo Diego de Alcobaza, quien recogió de labios de los indios comarcanos la tradicional creencia de haber estado los monumentos de Tiahuanaco dedicados al Hacedor del Universo (Huiracocha); y de que los habitantes autiguos, por