Lascivia No 63 Enero 2020 Lascivia 63 Enero 2020 | Page 337

captando una sensación de dominación animal, pronta a hacerse dueño de mi inocencia. Sus patas delanteras se asían a mis piernas, clavándome sus filosas uñas, sintiendo como su verga crecía en mi interior oprimiendo las ta- biques de mi matriz, rosándolas de una manera forzada, sin ningún mi- ramiento. Un grito escapo de mis labios, a lo que el animal parecía que eso lo incitaba, porque me apresaba mas bombeándome con todo su po- derío. Mientras mis gemidos y los jadeos del perro se aunaban en un sonido lleno de apetito sensual, sintiendo mi cuerpo explotar, mis pe- queños senos parecían estallar ante esa fogosa y insaciable cogida que estaba recibiendo de ese desconocido animal En cuclillas en el piso, ensartada, totalmente, y colocada sus patas so- bre mi espalda, en una demostración de poder o supremacía, Mi abertura comenzaba a inflamarse, como consecuencia de ese im- petuoso y feroz bombeo que me estaba encajando, su duro instrumen- to golpeaba sin perdón, el interior de mi sexo, me sentía extraña ante esta situación, llena de morbosidad. En un momento sentía que su ver- ga continuaba creciendo, en mi cándida intimidad, apropiándose de mi casta cavidad, mientras su jadeo muy cerca de mi cabeza se hacía sentir cada vez más intenso. Viendo su lengua fluctuando, me tenté en rosarla con la mía, me esta- ba entregando íntegramente a ese apareamiento animal, esa degrada- ción me deleitaba, me encantaba darme de esa forma tan humillante, mientras el perro se apetecía de mi sexo, machacando con total impuni- dad, hasta que sentí su esperma regar mi interior, llevándome a un pro- longado orgasmo. Mientras se mantenía atascado por su bola que impe- día sacar su fogosa verga, retomo sus patas delanteras sobre mi espalda, como demostrando su supremacía sobre mí débil figura. . Ese fue una situación Kafkiana, extraña, atípica pero llena de una sen- sualidad entre un perro y esta pequeña adolescente. En ese ínterin arribaron otros perros, mientras el negro intentaba