La Revista Digital 1 Versión Final Revista No. 2 - Prueva | Page 62

C. Kenny-Jordan preparación y capacitación de líderes locales, mediante los programas de extensión participativa conducidos por las instituciones locales, es promovida con este fin. Generalmente no se paga a los líderes campesinos por sus servicios como promotores del desarrollo. En la mayoría de estos casos, la comunidad reconocerá el trabajo de los líderes locales como una contribución especial, y, a menudo, compensan a estos líderes con tiempo libre de otros programas y trabajos comunales. Si este no es el caso, las instituciones locales deben encontrar formas de retribuir a los líderes que participan en sus programas, ya que este trabajo le reduce el tiempo que él o ella puede dedicar a sus trabajos productivos o el cuidado de la familia. A menudo la preparaci ón de líderes tiene resultados no esperados, como se explica en el Estudio de Caso 3. Estudio de Caso 3: Formación produce un resultado inesperado. La formación de líderes no sólo produces promotores de desarrollo. Cornelio Orbes y Magdalena Fuerez, por ejemplo, vinieron de la comunidad indígena de Cercado, en la provincia de Imbabura, Ecuador. Ellos fueron nombrados promotores comunitarios en marzo de 1995, después de que yo, como director del Proyecto de Desarrollo Comunitario Forestal en los Andes de Ecuador, firmé un acuerdo de colaboración con la Unión de Organizaciones Campesinas de Cotacachi. Debido a su conocimiento técnico, su sensibilidad, su honestidad y su compromiso, en menos de tres años Orbes y Magdalena se habían convertido en vicepresidente y presidente de la Unión Cornelio. Su formación como promotores les dio oportunidades para asumir un liderazgo en su comunidad. Esta situación no es un caso aislado. Ocurrencias similares son comunes en muchas otras partes de los Andes. Además de los líderes de la comunidad, he encontrado promotores capacitados en proyectos que ocupan otras posiciones importantes, tales como alcaldes, directores de proyectos y jefes de las entidades comerciales. Aplicación de principios de la gestión de riesgos. Las familias de los agricultores andinos están expuestas a muchos riesgos: disturbios políticos, instituciones débiles, conflictos sobre tenencia de la tierra o el agua, violencia, cambio climático, enfermedades y el vaivén de los precios de sus productos. Los agentes de desarrollo pueden apoyar a los agricultores a mejorar sus habilidades de gestión de riesgos, ayudándoles obtener de información fiable. Hay muchas fuentes de información en los Andes: otros agricultores y sus organizaciones, medios de difusión de noticias y de clima, instituciones públicas de investigación y de desarrollo, proyectos nacionales e internacionales de desarrollo y las ONG. No sólo se debe asesorar a los agricultores en cuanto a dónde se puede encontrar la mejor información, sino también los agentes de desarrollo deben ayudar a los agricultores a compilar e interpretar esta información, a fin de mejorar sus procesos de toma de decisiones. Los agricultores afrontan muchos riegos. Estos incluyen el financiamiento de sus proyectos y la producción, protección y comercialización de sus productos. También deben cuidarse siempre de mantener relaciones productivas 60 con sus organizaciones comunitarias y otras entidades o instituciones afines a su desarrollo. Considerando su situación personal, muchas veces los agricultores deben aplicar una combinación de acciones preventivas y correctivas de riesgos. Aquí es importante entender que gestionar riesgos tiene un precio. Tal precio puede ser relacionado con un costo directo, tal como la compra de un fertilizante, o un costo indirecto, o tener menos tiempo para solucionar problemas de la granja, la familia o la comunidad. Un buen agente de desarrollo ayudará a los agricultores andinos a encontrar un punto de equilibrio entre la gestión de riesgos y su precio, a fin de maximizar los beneficios logrados (Kahan, 2008). Incentivar la colaboración. Existen muchas fuentes de colaboración posibles como son las instituciones públicas de desarrollo, los proyectos nacionales e internacionales ambientales, los bancos y otras entidades financieras y los proyectos de infraestructura. Prácticamente todas las entidades nombradas necesitan el apoyo de la organización comunitaria y las familias campesinas para cumplir sus metas en los Andes. El papel de los agentes de desarrollo es asegurar que se logren negociar convenios justos y beneficiosos para las organizaciones comunitarias y sus familias. Para mayor seguridad, todo acuerdo de colaboración debe ser plasmado por escrito en un convenio. “Ganar- ganar” es la estrategia de negociación que facilita la elaboración de convenios donde todo participante gana. Al aplicar esta estrategia, los agentes de desarrollo deben seguir ciertas reglas: a) Saber exactamente lo que se quiere lograr para la comunidad; no tener una clara comprensión de los resultados buscados solo conducirá al fracaso. b) Comprender las metas y objetivos de todos los demás actores; conocer lo que los socios potenciales necesitan, permitirá determinar lo que ellos están dispuestos a pagar para conseguirlo. c) No se busca derrotar al otro, sino convencerle de que su propuesta es lo más racional y beneficioso para todos los involucrados. d) No temer alejarse de la mesa de negociación; es decir, no se debe sacrificar los objetivos en forma fácil, ni rápida. Dejar la mesa de negociaciones no significa quemar puentes. Recuerde, siempre se puede volver a la mesa de negociación más adelante. Para esto, muchas veces más importante que lograr un acuerdo a medias, es cultivar buenas relaciones con el potencial socio, a fin de asegurar negociaciones futuras (Shapiro, Jankowski y Dale, 1998). Escalar actividades a nivel de las cuencas. Lograr un manejo integral de cuencas debe ser la visión a largo plazo de todo PDAP (ver Figura 8). Sin embargo, no es fácil de alcanzar esta meta. Requiere recursos, tiempo y la participación decidida de todos los actores de la cuenca, directos e indirectos. Se anuncian a continuación algunos componentes claves de los programas de manejo integral de cuencas que todo agente de desarrollo debe manejar: 1. Una base sólida de conocimiento de la cuenca hídrica y de las fuerzas socioeconómicas que la influencian. Revista de Glaciares y Ecosistemas de Montaña 2 (2017): 51-64