LA LADRONA DE LIBROS La ladrona de libros | Page 20
Markus Zusak
La ladrona de libros
Sí, ya sé, ya sé, supongo que tiene que ver con el instinto, para detener la
irrupción de la verdad. En esos momentos, su corazón parecía escurrirse, estaba
acalorado y latía muy fuerte, muy, muy fuerte.
Me quedé mirando como una imbécil.
Lo siguiente: la madre.
La niña la despertó con el mismo temblor angustiado.
Si no te lo puedes imaginar piensa en un silencio extraño. Piensa en retazos
de desesperación flotan