La internacionalización de la empresa y el plan de exportación enero 2014 | Page 25

Más dificultades

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“El ánimo de la gente mejoró notablemente, a pesar de la situación
cada vez más preocupante del país, comenta Clara Rodríguez.
Todos veían que existe una salida, que nosotros, los que dirigíamos la empresa, habíamos acertado. Hasta finales del año 2000
estábamos exportando ya a la República Dominicana casi 10%
de nuestra producción.
Las señales que recibíamos de Santo Domingo eran muy alentadoras pero, seguíamos confrontando dificultades a la hora de
exportar. Había dificultades de todo tipo y sobre todo actuación
discrecional de la aduana.
Me acuerdo, continua Clara, que una vez, se hizo un control
antidrogas. Se pretendió analizar la tela para ver si no estaba
impregnada con algún alcaloide. Esto hubiera significado la
perdida completa del lote respectivo, retraso en la entrega al
distribuidor y toda la distorsión que se genera al no cumplir a
tiempo con un compromiso comercial. Después de algunas
horas de negociación aceptaron realizar un control por sondeo.
Tuvimos que sacrificar algunos trajes de baño para convencer a
la aduana que no éramos traficantes.
En otra oportunidad, cuenta Clara, cuando enviamos el tercer
lote de mercancía, se violentaron las cajas y por supuesto
desaparecieron un número importante de trajes de baño. El
problema no era la perdida material, porque la mercancía estaba
asegurada pero, la imagen ante el importador era desagradable. El distribuidor espera un cierto número de trajes de baño,
planifica su reparto entre las tiendas y cuando llega el lote, éste
es incompleto.

casos de estudio

Esto nos hizo repensar un poco el embalaje para el transporte internacional. Teníamos que reforzarlo a pesar de que cualquier reforzamiento, en el transporte aéreo, aumenta el peso y en consecuencia,
el costo. Subió el costo pero no se repitieron los robos.
Nuestra principal debilitad, sigue comentando Clara, es que la
empresa no puede ofrecer financiamiento a los clientes. En cualquier parte del mundo los clientes requieren de créditos de 60 y
90 días. En Europa se estila el financiamiento hasta por 120 días.
Nosotros no estamos preparados para esto. Una solución podría
ser el Banco de Comercio Exterior pero, reconozco, no tuvimos
tiempo para acercarnos y plantear el problema.”
“ Hay, también otro problema, interviene Javier Pérez. Nosotros importamos la materia prima, la procesamos y después exportamos
el producto. De acuerdo a la ley, SENIAT tendría que devolvernos
el arancel de importación. Es lo que se llama el draw back. Recibir