Me tocó hacer la residencia como maestra de 6to“ B” en la escuela Nro. 3 del distrito 2, conocida como“ la Solá”. Cuando me presentaron al grupo con el que iba a trabajar me dijeron que se trataba de un grado que venía con una trayectoria escolar bastante“ golpeada” porque les tocó hacer 1er grado en pandemia y después tuvieron muchos cambios de docentes a lo largo de los años. Se me sugirió entonces hacer propuestas que estuvieran pensadas para un 4to o 5to grado, de manera de no proponerles desafíos que no pudieran resolver.
No voy a negar que un poco me asusté, pero decidí que para transitar las dos semanas de observación intentaría despojarme de lo que me habían dicho sobre el grupo para elaborar mis propias ideas y poner la lupa donde a mí me pareciera pertinente, intentando no condicionarme por la“ etiqueta” de“ grupo golpeado”. En este sentido, el rol de residente puede traer la ventaja de una mirada nueva, fresca, que no carga con el cansancio del día a día. Mientras tanto, me empezaban a resonar ciertas preguntas:“¿ Qué efectos tuvo esa etiqueta para estxs niñxs? ¿ Qué responsabilidad tiene la escuela? ¿ Qué roles tienen lxs docentes y lxs estudiantes en el proceso de transformarla en el presente?”.
Así fue que conocí a 6to“ B”: Un grupo que podía trabajar en un buen clima de aula. Por momentos, muy relajado, por otros, muy bullicioso. Conocí a once niñxs que aún están construyendo su autonomía en el rol de estudiante. Vi que a veces algunxs se reían de lo que decía un compañero / a, que la mayoría no levantaba la mano para hablar, y les costaba escucharse. También vi cómo a veces se ayudaban entre ellxs y cómo jugaban todxs juntxs en los recreos.
Estaban quienes tenían preferencia por la Matemática o por la lectura, y quienes esperaban con ganas la hora de Educación Física … En fin, conocí a un grupo donde había once niñxs que por supuesto tenían diversos modos de hacer las cosas, diferentes intereses, facilidades y dificultades. Conocí a un grupo muy distinto a todos los otros grupos. Porque al final, no existe un grupo igual a otro. Y toda descripción dependerá de la mirada que se tenga sobre sus integrantes: les niñes.
Es decir, que vi más allá de la“ etiqueta” de“ grupo golpeado” y encontré muchas otras características que hacían a este 6to grado.
Sin embargo, sí pude ver el“ golpe” en ellxs. Esa trayectoria“ golpeada” de la