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Por Carolina Luzuriaga
- “Los aportes de los participantes han sido muy enriquecedores y muy importantes para poder seguir pensando al juego en las prácticas dentro del aula y como parte de la formación docente. Creemos que el proyecto ha sido tan potente que podría tener continuidad mediante otros encuentros, espacios de debate de taller colectivo, de creación, etc.”
(Ernesto, Gisela, Stephanie, Julieta).
- “El taller me brindó la posibilidad de trabajar con un gran grupo y compartir momentos de juego que nunca había presenciado con compañeres del Normal 7. Si bien en un primer momento me resistía a la idea de que el proyecto sea sobre el juego, al ir transitando las semanas, fui dejando atrás la crítica hacia el jugar por jugar, la vergüenza y pude ver que la problemática tenía mucho sentido. Hoy puedo afirmar que el juego debe ser parte de la formación docente para luego tener herramientas lúdicas que nos permitan trabajar con les chiques en un futuro cercano.” (Julieta).
- “Fue muy emocionante y poco usual ver un grupo tan grande de adultxs jugando porque sí, jugando en su espacio de formación, jugando para divertirse. Me llevo un montón de recursos lúdicos, de pensamientos nuevos, de herramientas construidas de conjunto. Me llevo un pedacito de la identidad de este profesorado que define esta materia en su programa. Me llevo un grupo de compañerxs con lxs cuales seguir reflexionando y luchando por esto que nos convoca y nos conmueve que es la Educación Pública de calidad y para todxs”. (Ana).
“Podemos evaluar al proyecto como muy potente desde el sentido que nos ha nutrido no sólo con juegos para luego compartir en otros ámbitos formales o no formales, sino también la idea de que se puede “jugar por jugar” sin ser el juego una herramienta para aprender un fin específico. El juego también enriquece valores humanos individuales y colectivos: las emociones, el sentido de grupo, la impredecibilidad, la sorpresa, la adrenalina, etc. (….) Creemos que los objetivos se han cumplido tanto los específicos como los generales ya que hubo un espacio de reflexión potente donde lxs estudiantes pudieron exponer las sensaciones y pensamientos que les dejó el encuentro, y sus reflexiones acerca del juego en los espacios de enseñanza tanto en el profesorado como en las prácticas docentes.”
(Ernesto, Gisela, Stephanie, Julieta).
REFLEXIONES DE LXS ESTUDIANTES:
GRUPO E IDENTIDAD