La gran SIETE Año 1 N° 1 | Page 28

A partir de los dibujos y de las características señaladas, un grupo intentaba adivinar a quién pertenecían esos rasgos que observaban y “leían” (mediatizado por las estudiantes) y que pertenecían a algunx de lxs niñxs del otro grupo.

Cuando creíamos que estábamos terminando, se nos impuso otra pregunta. Cómo iban a hacer estos niñxs para compartir con nosotras aspectos tan profundos si no nos conocen. Allí reflexionamos sobre otro contenido de la formación docente: el papel de la afectividad en la enseñanza. Entonces pensamos en incluir juegos al comienzo de la jornada que permitieran un vínculo afectivo inicial con lxs niñxs.

Finalmente, otro interrogante se impuso: si la identidad es un proceso relacional, personal y social, cultural, ¿Cómo incluir esta dimensión?

-la gran siete-

Para formar unx maestro, hace falta la tribu entera

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