LA ECONOMÍA DE MÉXICO EN EL TLCAN: BALANCE Y PERSPECTIVAS FRENTE AL T VOLUMEN 19-LA ECONOMIA-VERSION DEFINITIVA-17-MAYO- | Page 357

LA PROPIEDAD INTELECTUAL Y EL TLCAN 359 disminuir las obligaciones aduaneras y de negociación sobre prácticas anti- dumping Ronda Tokio, 1973-1979; formalizar acuerdos sobre barre­ras técnicas al comercio, intervención de los gobiernos, subsidios, valoración aduanera, permisos de importación y prácticas antidumping (Bermúdez et al., 2006). A principios de los años ochenta, el GATT quedó rebasado por la nueva realidad del comercio mundial, pues las transacciones comerciales eran más complejas, la revolución informática y las comunicaciones contribuyeron a la integración de procesos productivos acortando las distancias, las nuevas tecnologías transformaron el conjunto de la economía, realizando cone­xio­ nes electrónicas al mismo tiempo entre los distintos mercados abarcando largas distancias (Bermúdez et al., 2006). Estaba en curso la globalización de la economía, el comercio de servicios —no incluido por las normas del GATT— y las inversiones internacionales que se habían incrementado. La expansión del comercio de servicios estaba estrechamente ligada con el cre­ cimiento del comercio global de las mercancías. Asimismo, la estructura y normas del GATT resultaban insuficientes, situación que causaba preocupa­ ción entre sus integrantes. Estos y otros factores persuadieron a los miem­ bros del GATT de que debía hacerse un nuevo esfuerzo por reforzar y ampliar el sistema multilateral, éste se tradujo en la Ronda Uruguay con la Declaración de Marrakech y la creación de la Organización Mundial de Co­mercio (OMC) en 1994 (OMC, 2017). En los años ochenta del siglo XX, durante la Ronda de Uruguay (1986- 1994), Estados Unidos propuso una iniciativa para la armonización y forta­le­ cimiento del marco regulatorio de la propiedad intelectual, y específicamente de los sistemas de patentes. La propuesta pretendía modificar el marco le- gal de los DPI a las necesidades de las estrategias tecnológicas de las empresas trans­nacionales —de las industrias química, farmacéutica y electrónica— innovadoras e impulsoras de tecnología en el contexto internacional. Sin embargo, algunos especialistas señalaron que era una especie de protec­ cionismo tecnológico para contrarrestar el desempeño imitativo de paí- ses en desarrollo (Aboites, 2005). Para Carlos Correa (1999), en los hechos, las de­cisiones tomadas en esta ronda afectaron a un conjunto de polí- ticas naciona­les económicas y comerciales de países en desarrollo y menos desarrollados, mediante la adopción de las reglas de competencia que debía regir entre los países miembros, quedando de manifiesto un importante diferencial de desarrollo tecnológico y económico entre ellos. Una vez aprobadas esas propuestas y con la reconfiguración espacial de la economía mundial apoyada en los avances tecnológicos, entre otros fac­ tores, surge un nuevo modelo de globalización, y en paralelo se crea la OMC, cuyas funciones se centraron en: 1) administrar los nuevos acuerdos