LA ECONOMÍA DE MÉXICO EN EL TLCAN: BALANCE Y PERSPECTIVAS FRENTE AL T VOLUMEN 19-LA ECONOMIA-VERSION DEFINITIVA-17-MAYO- | Page 301

LAS GRANDES EMPRESAS Y LA INVERSIÓN EXTRANJERA EN MÉXICO 303 Hay corporaciones de algunos países de la Unión Europea, de Japón y de Corea que han estado realizando inversiones en México. El criterio para ampliar sus actividades de producción en el país no es el incremento del mercado interno y tampoco la construcción de una plataforma exportado- ra para Europa, Asia o algunos países de América Latina. Las decisiones de inversión se han tomado considerando la competencia y las condiciones de ingreso al mercado de Estados Unidos. La vigencia del TLCAN es un elemento fundamental para explicar la realización de esas inversiones, considerando las reglas establecidas en el acuerdo para garantizar un co- mercio que no se encuentre sujeto a impuestos entre los países firmantes del acuerdo y la eliminación de otras restricciones para los productos en- samblados en México con destino a Estados Unidos. La composición de las exportaciones y su alto contenido importado, como se documenta más adelante, confirman esta observación. Al momento de la firma del TLCAN, la economía en México está tenien- do cambios producto de la acción de algunos actores sociales que no obje- tan los contenidos del acuerdo comercial y de inversiones entre las tres economías del norte de América. Desde años antes, opera en el país en la manufactura un importante grupo de empresas maquiladoras de exporta- ción concentradas en pocas actividades. Para este sector los contenidos del TLCAN resultan positivos y, como se presenta adelante, son importantes en el crecimiento de las exportaciones manufactureras. Asimismo, para las empresas de la industria automotriz, que habían estado realizando inver- siones en la segunda mitad de los ochenta y la primera parte de los noven- ta, construyendo nuevas plantas de ensamblaje de vehículos automotores cuyos productos estaban mayoritariamente destinados al mercado de Es- tados Unidos. Un ejemplo es Ford que, como se destaca desde páginas previas, tiene una larga historia de operar en el país. La compañía puso en operación en 1983 una planta de fabricación de motores en Chihuahua y, posteriormente, en 1986 una fábrica de automóviles y de estampado y en- samblaje en Hermosillo. Las reglas de origen establecidas en el TLCAN, en el caso de la fabricación de televisores y de vehículos automotores, confirman la construcción de un espacio específico de competencia favorable a un cierto grupo de firmas transnacionales que operan en la región, organizando segmentos de sus actividades productivas para cubrir el mercado de Estados Unidos, sin que ello comprenda un incremento equivalente de sus relaciones con otros sectores de la producción de manufacturas en México. Por ello, un cambio en las reglas de origen modifica las condiciones para las firmas que tienen inversiones en México fabricando algunos productos con destino principal a Estados Unidos. Lo característico de la mayor parte de las exportaciones