LA ECONOMÍA DE MÉXICO EN EL TLCAN: BALANCE Y PERSPECTIVAS FRENTE AL T VOLUMEN 19-LA ECONOMIA-VERSION DEFINITIVA-17-MAYO- | Page 298

300 GREGORIO VIDAL manufacturas es relevante. Las ET con matriz en Estados Unidos, acompa- ñadas de algunas otras firmas, tienen la condición de líderes en el sistema industrial desarrollado desde finales de los años cuarenta hasta principios de los setenta. La forma en que se produce la sustitución de importaciones estimuló su presencia y favoreció su crecimiento. “Las ET no constituyen un enclave en ciertas áreas localizadas de la estructura industrial, sino que conforman un conjunto integrado que se articula a través de las relaciones interindustriales” (Fajnzylber y Martínez Tarragó, 1976:365). En los años siguientes este hecho no se modifica. Por tanto, un elemento que caracte- riza a la relación de las economías de México y Estados Unidos en el perio- do comprendido entre finales de los años cuarenta hasta finales de los setenta del siglo pasado, es la implantación en el país de un número rele- vante de firmas con matriz en Estados Unidos, la mayor parte son empresas transnacionales (ET) que tienen un papel destacado en la dinámica de la economía de México y ocupan un lugar de líderes en las actividades en que participan (Fajnzylber y Martínez Tarragó, 1976). Dominan mercados, influyen en la formación de precios, utilizan el sistema de crédito interno y se benefician de las políticas ejecutadas por la administración federal, incluida la protección en materia de importaciones a la producción manu- facturera y los precios de los energéticos. En ese periodo no hay inversiones importantes por parte de empresas con matriz en México en territorio de Estados Unidos. Es la situación que prevalece hasta los años ochenta cuan- do gana fuerza la aplicación de las políticas de ajuste económico y las refor- mas que constituyen la denominada agenda del Consenso de Washington. E L TLCAN Y LAS ECONOMÍAS DE M ÉXICO Y E STADOS U NIDOS Antes de la firma del TLCAN, a finales de los años ochenta, avanza en Mé- xico la liberalización financiera. Se eliminan techos a las tasas de interés y su nivel pasa a depender pronto de los flujos internacionales de capital. En materia comercial se suprimen las licencias a las importaciones que apenas en 1985 cubrían el 92% de la producción, y se efectúa una reducción gene- ralizada en las tarifas a las importaciones. En materia de inversión extran- jera hay hacia 1989 una amplia liberalización de las regulaciones que restringían su acción en el país, sin cambiar hasta ese momento la ley vigen- te (Vidal, 2001:35-41). Al lado de todo ello se ejecuta un programa de pri- vatizaciones que privilegia la adquisición de los activos por cuenta de capitales del país. Un ejemplo destacado es la privatización de los bancos comerciales, todos ellos comprados por grupos empresariales, firmas de las finanzas o grandes capitales de México (Vidal, 2001:140-143). También