LA CORTE DE LUCIFER - OTTO RAHN La Corte de Lucifer - Otto Rhan | Seite 154
reelaborada como una cruz.
Todo esto me da mucho que pensar...
Mañana por la mañana me voy de Brixen. Un trecho de camino
lo haré caminando. Pasaré por Sterzing, hoy Vipiteno; después por
el asentamiento godo Gossensass, hoy Calle d'Isarco, donde una vieja
herrería señala el castillo de Wolfenburg. Aquí estuvo escribiendo
Wieland en aquellos tiempos. Luego remontaré el paso Brenner.
La ruta que recorreré es una antiquísima ruta del ámbar. De
Venecia conduce al valle del Adigio, al Brenner; yendo por el
Rosenjach al interior del valle, pasa cerca de Passau y sigue adelante
hasta las costas frisonas y hacia las orillas del Erídano (el Elba o el
Eider), que entonces, probablemente, era un gran río y hoy es sólo
un riacho que separa Holstein de Scheswig. El Erídano es, según nos
documenta Heródoto cerca del año 450 a. C., "un río que desembo-
ca en el Mar del Norte" y por el que llega el ámbar. Ya Hesiodo
(siglo VIII a. C.) tenía noticias de él.
Una segunda ruta del ámbar salía de Marsella por el valle del
Ródano. Cerca de Chálons se bifurcaba. El brazo occidental
tocaba Metz y Tréveris, cruzándolas, estrechándose por lo altos
Acht, la sierra del Eifel y llegaba a la antiquísima ciudad de
Asciburgium (¿la Asberg cerca de Mores actual?) del Rin. Antes de
entrar en Colonia, fue el lugar más importante por doquier,
incluso de todo el Rin. Más allá de Westfalia, de la landa de
Lüneburg y de la región sajona-frisona, la ruta acaba por las
riberas del Erídano. El brazo oriental de la ruta que viene de
Marsella une Chálons con Basilea, y ésta con Frankfurt y
Götingen. También aquí el objetivo era el Erídano. Quien tomó
esta ruta vio la Selva Negra, el bosque del Oden, donde fue
muerto Sigfrido, el Feldberg en el Taunus donde se le enseñó a la
valquiria Brunilda la cama de roca, Wetterau y el Vogelsberg
del alto Hesse, el Westerwald, el Siegerland y la montaña Rothaar.
Todas estas rutas cruzaban el bosque del Harz y se unían con