LA CAVERNA DE SARAMAGO Saramago, Jose - La caverna | Page 225

asumir el papel de mentor y pedirle que se comportase de manera que no atrajese las atenciones de quienquiera que fuese, guardas o no guardas, Es la única manera correcta de proceder para quien vive aquí. Entonces Cipriano Algor sacó del bolsillo un papel, Copié estas frases de algunos carteles expuestos, dijo, espero no haber llamado la atención de ningún espía u observador, También lo espero yo, dijo Marcial de mal humor, Es sospechoso copiar frases que están expuestas para que los clientes las lean, preguntó Cipriano Algor, Leerlas es normal, copiarlas, no, y todo lo que no sea normal es, por lo menos, sospechoso de anormalidad. Marta, que hasta ahí no había participado en la conversación, le pidió al padre, Lea las frases. Cipriano Algor alisó el papel sobre la mesa y comenzó a leer, Sea osado, sueñe. Miró a la hija y al yerno, y como ellos no parecían dispuestos a comentar, continuó, Vive la osadía de soñar, ésta es una variante de la primera, y ahora vienen las otras, una, gane operacionalidad, dos, sin salir de casa los mares del sur a su alcance, tres, ésta no es su última oportunidad pero es la mejor, cuatro, pensamos todo el tiempo en usted es hora de que piense en nosotros, cinco, traiga a sus amigos si compran, seis, con nosotros usted nunca querrá ser otra cosa, siete, usted es nuestro mejor cliente, pero no se lo diga a su vecino, Esa estaba