KALEIDOSCOPIO KALEIDOSCOPIO 1 | Page 25

latente y, si bien tal fenómeno puede causarnos un cierto temor ante la pérdida o modificación de lo esencial en un pueblo, también nos posibilita a que cada individuo se ubique donde quiera ubicarse, construirse a sí mismo, y en especial en el ámbito literario, donde a pesar de abordar temas universales, como literato no puedes negar la cruz de tu parroquia. En las letras mexicanas «Después de la independencia política se procura trabajar de cierta independencia cultural y literaria, entonces la literatura en el siglo XIX intenta cumplir con esa función muy específica, pedagógica, de construir, de decir a esa nueva nación cómo es y a qué rumbos se desarrolla; cuál es la idiosincrasia del país y de su población […] La literatura mexicana es un fenómeno muy joven, sencillamente que no puede construir desde cero ,sino necesita algunos modelos hacia los que se puede orientar [..]es completamente inevitable, es completamente normal. […] el concepto de transculturación donde una cultura específica da algo, la otra cultura lo recibe pero lo devuelve también» (Andreas Kurz) «Cada país tiene su estilo, en México también tenemos nuestra literatura clásica: un Popol Vuh, un Canek y, hablando de una línea más contemporánea, si Japón tiene el haiku, México tiene el albur», acierta Erik Márquez. Estamos hablando de algo que ya no es meramente originario, ya se dio de esa mezcla entre culturas; hemos asimilado tantas cosas que luego llegamos a hacer deformaciones peculiares, pero que resultan muy interesantes, «somos un hermoso caleidoscopio; así tan distinto, como cuando vamos en el bus y vemos que todos somos diferentes. ¿Será que no tiene uno que encontrar...? A lo mejor es eso, o sea, ¿por qué tiene uno que ponerse una etiqueta? ¿Por qué nos tiene que definir? Porque pareciera que a mí todo me parece una trampa política», escuchamos en boca de la Doctora Yolanda, pero es una necesidad como ser humano que jamás se podrá dejar de lado; hasta cierto punto, es ese sentido de pertenencia que buscamos siempre tener, y que si nadie no lo da nos vamos hasta lo más subjetivo. Podemos escuchar cómo una fusión de todas estas tan diversas perspectivas que «es muy difícil definir qué es ser mexicano, es una mera convicción, una