JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA A ALEMANIA JUDÍOS DECLARAN LA GUERRA CONTRA ALEMANIA | Page 90
tanto, los actos terroristas son un acto de fidelidad al Dios que advierte y
reconoce a su pueblo. El mito del "Holocausto" fue creado para legitimar el
racismo judío. Demasiados soldados creen que el "Holocausto" puede justificar
cualquier acción criminal contra los árabes.
Sobre el Estado israelí, el Director del Fondo Nacional Judío, Yossef Weitz,
escribía ya en 1940: Debe quedar claro para nosotros que no hay lugar para
dos pueblos en este país. Si los árabes lo abandonan, nos bastará. No existe
otro medio que el de desplazarles a todos; es necesario no dejar una sola
aldea, una sola tribu. Es preciso explicar a Roosevelt, y a todos los Jefes de
Estados amigos, que la tierra de Israel no es demasiado pequeña si todos los
árabes se marchan, y si las fronteras se ensanchan un poco hacia el norte, a lo
largo del Litani, y hacia el este sobre los altos del Golán 130
Ahora, dice ceresole, ―(…) ese "Estado Divino", habitado por un "Pueblo
Elegido", planea y ejecuta una guerra de destrucción y de exterminio, un
verdadero genocidio contra los pueblos musulmanes (en principio, árabes y
persa), siempre protegido por el escudo ideológico del "mito de los seis
millones" 148 . Entonces, a partir de la Segunda Guerra mundial, la evolución no
del pensamiento sino del sentimiento occidental, manifiestamente operado
desde la confluencia teológica y estratégica existente entre los Estados Unidos
de América y el Estado de Israel, la cuestión del "Holocausto", es
indiscutiblemente vital.
En otro pasaje del libro, nuestro autor expresará enfáticamente, todos buscan
lavar y hacerse perdonar de sus pecados, las más de las veces irreales,
cometidos en el pasado, con lo cual convalidan una situación de poder,
desprovisto de cualquier fundamento moral, existente en el presente. ―Es por
ello que la destrucción del Mito no puede ser sino un acto re-fundacional
abarcante de la totalidad del mundo contemporáneo 149 ‖. Entonces la
devastación del Mito, laboriosamente construido, ―será el corte de ese cordón
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CERESOLE, Norberto, Palestina la única víctima, del Holocausto, Biblioteca Tiempos
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difíciles, p. 24 . CERESOLE, Norberto, La falsificación… Ob. Cit. p 188
Ibíd. p. 226
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