La cultura en la imaginación antropológica
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este modelo se hacen estudios entre ‘comunidades’ que no son
consideradas ‘grupos étnicos’ ni se limitan a lo rural, en Colombia
su aplicación paradigmática la constituyen inicialmente las
‘comunidades’ ‘indígenas’ y ‘negras’ en las áreas rurales alejadas
de las medianas y grandes ciudades. Más aún, para las primeras
generaciones de antropólogos del país este modelo era hegemónico
y la ‘comunidad indígena’ lo encarnaba por antonomasia. Tanto
que los iniciales intentos de algunos antropólogos de aplicarlo a
las ‘comunidades negras’ del Pacífico colombiano o de Palenque
de San Basilio eran considerados por otros colegas como fallidos
esfuerzos por fuera de la disciplina (cfr. Friede mann 1984).
Aeste modelo de la cultura como isla se le han hecho fuertes críticas. En
primer lugar, se le ha cuestionado el haber llevado a un culturalismo,
esto es, a un reduccionismo explicativo en el cual la cultura se
convierte en la palabra mágica a la que se recurre reiterativamente
para explicarlo todo. Como reduccionismo, el culturalismo es una
negación (o subsunción a lo cultural) de lo económico, lo histórico o
lo político en las interpretaciones antropológicas. En otras palabras,
el culturalismo o reduccionismo cultural consiste en intentar explicar
en términos culturales o simbólicos un fenómeno desconociendo sus
dimensiones sociales, políticas y económicas. En segundo lugar, se
ha cuestionado al modelo de cultura como isla que desconoce el
papel de las interacciones e influencias en la configuración de las
culturas. En palabras de Eric Wolf: “[…] las poblaciones humanas
edifican sus culturas no en asilamiento sino mediante una interacción
recíproca” ([1982] 2000: 9). Por tanto, es posible afirmar que este
modelo supone una violencia teórica y metodológica al mostrar como
fijos y aislados lo que son fenómenos procesuales e interconectados.
En tercer lugar, se considera que este modelo de cultura tiende a
borrar la diferencia y la desigualdad al interior de lo que aparecen
como entidades establecidas (cultura, localidad, población). Así, la
cultura se asume como comunalidad original, como algo dado en
anterioridad y con una identidad esencial. Por tanto, las voces críticas