Intervenciones en teoría cultural | Page 28

La cultura en la imaginación antropológica 27 este modelo se hacen estudios entre ‘comunidades’ que no son consideradas ‘grupos étnicos’ ni se limitan a lo rural, en Colombia su aplicación paradigmática la constituyen inicialmente las ‘comunidades’ ‘indígenas’ y ‘negras’ en las áreas rurales alejadas de las medianas y grandes ciudades. Más aún, para las primeras generaciones de antropólogos del país este modelo era hegemónico y la ‘comunidad indígena’ lo encarnaba por antonomasia. Tanto que los iniciales intentos de algunos antropólogos de aplicarlo a las ‘comunidades negras’ del Pacífico colombiano o de Palenque de San Basilio eran considerados por otros colegas como fallidos esfuerzos por fuera de la disciplina (cfr. Friede mann 1984). Aeste modelo de la cultura como isla se le han hecho fuertes críticas. En primer lugar, se le ha cuestionado el haber llevado a un culturalismo, esto es, a un reduccionismo explicativo en el cual la cultura se convierte en la palabra mágica a la que se recurre reiterativamente para explicarlo todo. Como reduccionismo, el culturalismo es una negación (o subsunción a lo cultural) de lo económico, lo histórico o lo político en las interpretaciones antropológicas. En otras palabras, el culturalismo o reduccionismo cultural consiste en intentar explicar en términos culturales o simbólicos un fenómeno desconociendo sus dimensiones sociales, políticas y económicas. En segundo lugar, se ha cuestionado al modelo de cultura como isla que desconoce el papel de las interacciones e influencias en la configuración de las culturas. En palabras de Eric Wolf: “[…] las poblaciones humanas edifican sus culturas no en asilamiento sino mediante una interacción recíproca” ([1982] 2000: 9). Por tanto, es posible afirmar que este modelo supone una violencia teórica y metodológica al mostrar como fijos y aislados lo que son fenómenos procesuales e interconectados. En tercer lugar, se considera que este modelo de cultura tiende a borrar la diferencia y la desigualdad al interior de lo que aparecen como entidades establecidas (cultura, localidad, población). Así, la cultura se asume como comunalidad original, como algo dado en anterioridad y con una identidad esencial. Por tanto, las voces críticas