Intertexto3.0 -Aniversario | Page 66

3. CONTACTOS CON OTRAS CULTURAS 3. Contactos con otras culturas En realidad, el estudio comparado de las religiones ha venido intentando descubrir estos orígenes, sin poder dar con su objetivo final, esto es, captar la religión de los pueblos más primitivos en toda su plenitud; es probable que no se logre nunca. Pero la investigación sobre el desarrollo de los pueblos que protagonizan la Ilíada nos ha permitido dar cuenta de la enorme cantidad de relaciones que estas sociedades han estrechado entre sí y con otras culturas. El período que comprende los años 3000 a. C. hasta el 1000 a. C., y más aun, se compone de una larga transición de migraciones y contactos que sin duda suponen múltiples influencias. Así lo evidencia el hecho de que naciones tan lejanas entre sí hayan tenido tantos elementos en común. La primera civilización descrita en la sección 1. revela el primer contacto en el que nos detendremos: Creta. 3.1. Creta El ya citado Will Durant presenta sobre Creta un espléndido panorama acerca de su civilización, que se vuelve una fuente de datos interesantísimos para nuestro trabajo. Según el autor, la actual costumbre de usar la palabra ‘hombre’ para designar a toda la humanidad, es claro reflejo de los prejuicios de una época patriarcal, y difícilmente se acomoda a la vida casi matriarcal de la antigua Creta. Las mujeres de los tiempos minoicos no conocieron ninguna forma de reclusión a la oriental, nada semejante al purdah o harén, pues no hay indicio alguno de que hayan sido encerradas en determinadas partes de la casa ni en el hogar 71 . Ciertas características de Creta muestran esta importancia otorgada a la mujer, sobre todo en torno a la religiosidad, ámbito en el cual podemos ver solemnes desfiles de mujeres cargando frutos y flores, los cuales eran tributados a su diosa “que era llevada, con toda pompa, en su palanquín” 72 . Así como ésta, podemos descubrir otras prácticas sobre esta cuestión, pero nos focalizaremos sobre todo en aquellos que puedan relacionarse indirecta o directamente con la cultura estudiada en este trabajo. En esta civilización, la mujer también trabajaba en la casa; pero no era ésta su única actividad. Colaboraban también con sus esposos en las faenas agrícolas y en la alfarería, participaban, a veces en lugar de ellos, de la vida externa, y se sentaban en primera fila en los teatros y en los juegos, practicando también los mismos, entre los que el que más les interesaba a los habitantes de la región eran las corridas de toros. Incluso llegan las mujeres a ser tema de adoración. Tanto es así que, en la línea de la particular adoración que tenían los cretenses por la belleza y el gran estilo, los hombres obsequiaban a sus esposas toda clase de joyas para hacer brillar su natural hermosura. La exhibición de sus cuerpos no era aquí un motivo de pudor como lo fuere entre los griegos de etapas posteriores, pues en cierto momento de su historia ellas descubrían sus pechos o los dejaban entrever a través de camisas transparentes. 71 72 Durant, op. cit., p. 31. Ibid., p. 37.