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conjunta, se cubrirá hasta 75% del costo total del proyecto, con un tope de 90 millones de pesos cuando la postulación sea entre dos entidades, y un 80% del costo total con tope de 120 millones de pesos en caso de presentarse tres o más entidades. En cada uno de los casos, el resto del financiamiento debe ser aportado por la o las entidades beneficiadas.
Pero, ¿cuáles son los cambios que se desea implementar? O más bien, ¿en qué cambiará la formación? La respuesta está en estrecha relación a lo que necesitan y necesitarán las empresas y compañías el día de hoy y el día demañana.
Lo que se busca es la formación de un ingeniero integral, un profesional capaz de desarrollarse de manera transversal en la organización, con un perfil muy desarrollado en lo técnico, pero a la vez con un excelente desarrollo y manejo de habilidades blandas y relaciones interpersonales óptimas, que le permitan llevar de mejor manera su liderazgo. Además deberá poseer un buen dominio en otro idioma (de preferencia inglés), que le permita desarrollarse de buena manera con profesionales extranjeros. También deberá ser un profesional que conozca, entienda y maneje temas de sostenibilidad en materia de recursos naturales, así como sobre la automatización de procesos en proyectos de todo orden.
Para esto, otro gran desafío es el poder incorporar estos elementos a las mallas curriculares, pero a la vez acortándolas, de modo que una ingeniería civil debiese durar del orden de los 4-5 años, que es el promedio en otros países, como Finlandia, Bélgica y Francia.
En cuanto a la participación en el proyecto, ya se lo han adjudicado algunas entidades, destacando dentro de ellas la Pontificia Universidad Católica de Chile en conjunto con la Universidad Técnica Federico Santa María; la Universidad de Santiago y un bloque conformado por la Universidad de la Frontera, Universidad del Bío Bío y Universidad de Talca, entre otras. En la Universidad de Santiago, el proyecto fue presentado el 14 de junio por el Vicedecano de Docencia y Formación de la Facultad de Ingeniería y director del proyecto, Dr. Ricardo Vega, y en los distintos departamentos de Ingeniería de la Facultad los expertos ya han iniciado las mesas de discusión para comenzar a realizar las primeras definiciones respecto del futuro de las carreras.