DOBLAJE QUE UNIVERSALIZA LA CULTURA AUDIOVISUAL
Juan Echave, diseñador gráfico,
actor, doblajista y director de
doblaje. Diez años de profesión
dando talento interpretativo de
Argentina hacia todo el mundo.
- ¿Cómo fue que elegiste ser doblajista y
formar parte de este mundo?
Fue una decisión de chico, desde los ocho
años siempre me fascinó el mundo del
lenguaje, las clásicas serie de los 70 y los
80 por supuesto pero nunca tuve el
conocimiento suficiente para poder
desarrollarlo acá. No sabía que acá se
hacía esta actividad, no sabía que se hacía
doblaje. Soy diseñador gráfico, trabajé en
diseño durante 22 años hasta que un día
llegó gracias a una revista Viva de Clarín,
para ser sincero arribó mediante una nota
la inquietud a mí. En la cual en esa nota
hablaban compañeros que contaban sus
experiencias en el doblaje, hablaban
sobre
sus
personajes
como
se
desarrollaba y que se hacía.
Me entusiasme muchísimo busque
lugares para estudiar y prepararme, me
formé durante un año entero en un
instituto a modo intensivo y luego me tiré
de cabeza a las salas a probarme para ver
que se podía hacer. Me incline a conocer y
escuchar como trabajaban los actores
profesionales en ese momento y bueno la
experiencia fue muy rica. Desde ahí poco
a poco, una intervención en una película,
un personaje pequeño en una serie, paso
a paso se fue haciendo una carrera en la
que desde que inició nunca dejé de
trabajar. Todos los días hay una actividad
para hacer. Lo cual es muy gratificante
porque da la posibilidad de desarrollar
distintos personajes y poder contactarme
con varios directores en distintos estudios
para distintos países con materiales
diversos. No hay un día que sea igual al
otro así que es muy grata esta actividad.
¿Cómo fue tu relación con lo técnico del
doblaje? La edición, los tiempos, la
grabación las bandas sonoras.
De chico siempre me gustó el tema del
audio, siempre me gustó grabar cosas,
jugaba con mi grabadorcito, grababa
sonidos de la calle, grababa de la tele,
incluso a escondidas cosas que se
hablaban ¡Un peligro! ¿No? (Risas).
Hacia lectura de cosas, como una locución
amateur. El contacto con la edición y
grabación fue también como retomar un
volver
al
niño
y
reutilizar
profesionalmente las herramientas de
cuando era un niño.