How to Coach Yourself and Others Coaching De Vida | Page 81
Todo comportamiento tiene un propósito. Nuestras acciones no son aleatorias, sino que con ellas tratamos
siempre de conseguir algo. Siempre nos estamos moviendo hacia alguna clase de objetivo, aunque no nos
demos cuenta de ello. Márcate tus propios objetivos, no dejes que otros lo hagan por ti.
Tener alguna opción es mejor que no tener ninguna. Encuentra las opciones que mejor se adapten a tus
valores y síguelas.
Lo estás haciendo lo mejor posible y aún puedes hacerlo mejor.
Creamos nuestra realidad. Nuestras creencias, objetivos y valores constituyen las principales características
de nuestros mapas mentales, que a su vez dan forma la mundo que percibimos. Actuamos como si estos mapas
fuesen reales. Puede que esos mapas sean buenos y nos proporcionen mucha libertad para explorar o, puede que
nos limiten nuestras posibilidades. Es imprescindible revisar los propios mapas mentales, lo que creemos que es
posible y real para nosotros.
Tienes todas las respuestas. Las respuestas a tus preguntas deben salir de ti mismo.
Las creencias limitadoras son el principal obstáculo y las culpables de que no alcancemos nuestras metas ni
vivamos nuestros valores. Pregúntate:
¿Qué te impide alcanzar tu objetivo?
Las creencias limitadoras suelen tener su origen en la infancia, permanecen ocultas y no las evaluamos
conscientemente. También absorvemos creencias limitadoras de los medios de comunicación, de las personas
con las que interactuamos normalmente, de la sociedad, familia, amigos, etc.
Ejemplos típicos de creencias limitadoras:
Tengo que trabajar muy duro para ganarme la vida.
Sin sufrimiento no hay beneficio.
Para ser feliz tengo que ganar mucho dinero.
El éxito requiere tiempo.
No puedo fiarme de nadie.
La mayoría de la gente tiene más suerte que yo.
No hay forma de superar un mal comienzo en la vida.
He llegado a los límites.
No puedo lograr lo que deseo.
Esto es imposible.
Soy incapaz de alcanzar mis metas.
Es muy difícil conseguir lo que quiero.
Nunca consigo lo que me propongo.
No soy bueno en eso y nunca lo he sido.
Como conclusión, recuerda que los obstáculos se crean en el mundo exterior a partir de las creencias limitadoras
de nuestra mente.