Monómeros, ya era…, un médico…,
que inventó mil pretextos, todos los
día le ponía un papá diferente al bebé”.
Entre tanto, la relación de Ana tampoco
pasaba por un buen momento, ella
no accedía a tener relaciones sexuales
con su novio, lo que ocasionó malestar
en la relación y se desencadenaron
sucesos que hicieron fracturar la relación
generando una ruptura de la misma.
Después de esto, Ana conoce a otra
persona, justo en una fiesta, algo por
demás extraño, porque ella no es
“mujer de rumba”, termina involucrándose
afec�vamente con él, siente que ahora
las cosas serán diferentes, se mostraba
afectuoso, se portaba bien y la retaba
permanentemente a salir adelante,
en especial a estudiar; por esos días ella
había hecho un curso de vigilancia, que si
bien no pudo obtener el cer�ficado, por
el asunto aquél del Colegio que no estaba
registrado, esperaba ocuparse en eso;
sin embargo, su novio le decía que no la
veía en ese oficio, entonces decide buscar
otras opciones y como le gustaban las
matemá�cas pensó estudiar contabilidad:
“me me� en el SENA a estudiar, no había
cupo para contabilidad, entonces lo que
hice fue manejo de inventarios y costos en
abarrotes…, me gradué y esa noche me
dijo vamos a celebrar…, hasta ese
momento yo como que bueno… de pronto
no me va a pasar lo mismo, intentemos a
ver qué pasa, nos fuimos para un motel,
yo con ese miedo…, podré tener una
relación, él me decía qué �enes…, yo le
conté y me dijo sí quieres no hacemos
nada, yo dije lo quiero intentar …, él dijo
vamos a intentar, si tú vez que no puedes
ahí la dejamos…, yo con ese miedo…
le decía espérate, no puedo…, tengo que
poder, tengo que salir adelante, tengo que
enfrentar esto, porque no puedo vivir toda
la vida con miedo…, Yo enfrenté mi miedo…,
me sen� bien, después que terminamos
me puse a llorar”.
Siguieron una relación normal, Ana relata
que sabía muy poco sobre la prevención
de un embarazo, su madre jamás tocó
estos temas, en el colegio menos,
sin embargo, le preguntó a su pareja
qué hacían para no quedar en gestación,
él le da una voz de tranquilidad, porque
tenía varicocele y según este diagnós�co,
solo podría tener hijos si se some�a
a un tratamiento. Ella no quedó muy
convencida y le insiste: “Yo no sé mucho
del tema, pero un embarazo ahorita,
entonces mejor cuidémonos, y me dice,
es que a mí no me gusta el condón…,
entonces me cuido yo, y me dice bueno tú
verás..., empecé con pas�llas, un día
me las tomaba otro día no, cuando tenía
relaciones me las tomaba ahí y ya, o sino
ni le paraba bolas..., me compraba
las post day…, cada vez que teníamos
relaciones, pum me las tomaba,
NO ERA
ALGO
SEGURO”.