tillo, aparecieron en sucesivas ocasiones diversas tumbas en cista y en covachas. Se trata de enterramientos individuales o más raramente de dos personas( hombre y mujer recostados uno frente a otro). Los ajuares encontrados estaban constituidos por pequeños vasos carenados y otros objetos como puñales y adornos personales de metal.
En prospecciones posteriores también se ha encontrado en esta zona cerámica perteneciente al Bronce Tardío. Concretamente se hallaron fragmentos de cerámicas tipo Cogotas 49 de las que ya había alguna referencia desde los años cuarenta( Martínez Santaolalla presentó algunos restos de la zona de Salobreña en el II Congreso del Sudeste en 1946) 50.
En la ladera suroeste del castillo, Arteaga encontró en sus prospecciones una serie de restos cerámicos que identificó como del Bronce Pleno( el profesor Malpica opina que son del Bronce Final) 51. Es probable que algo más al este que el poblado calcolítico del promontorio de esta localidad, en un lugar más enriscado, hubiese en esta época un poblado constituido por veinte o treinta viviendas construidas con un sistema similar al del período anterior pero de planta rectangular, cuya necrópolis fuera la comentada más arriba, donde podrían vivir algo más de un centenar de personas. Procedente de este lugar Arteaga encontró cerámica del Bronce Final similar a la encontrada en la vega de Granada, lo cual nos deja clara la conexión entre ambas zonas 52. También en la cara sur del promontorio se encontraron varios enterramientos en cistas. No hay que olvidar además que el peñón continúa siendo ocupado para su utilización como zona de aprovisionamiento de productos marinos.
En la zona montañosa occidental de la costa granadina más próxima al mar se encuentran dos lugares arqueológicos interesantes. Nos estamos refiriendo al barranco de Ítrabo( Molvízar) en las afueras de esta localidad, donde se hallaron diversos fragmentos cerámicos entre los que destaca un vaso carenado que parece indicar la posible presencia en las proximidades de una necrópolis argárica y el poblado al que estuvo vinculado, y sobre todo al repecho de la Tinajilla( Lentegí), donde se descubrió una necrópolis argárica de cistas que C. Millán estudió en 1940. En cada una de las doce tumbas excavadas se encontraron, además de los restos óseos correspondientes, dos vasos carenados 53.
Almuñécar ha deparado también importantes yacimientos, imprescindibles para explicar el desarrollo del Bronce en la comarca; así, además del mencionado cerro de San Miguel, en la ladera sur de la parte alta del cerro de Velilla se hallaron, durante los trabajos agrícolas realizados en la finca allí situada, numerosos materiales que, aunque no se llegó a excavar por arqueólogos, a tenor de lo contado por sus descubridores podrían pertenecer a una necrópolis argárica, seguramente de cistas, con sus correspondientes ajuares metálicos y cerámicos.
La necrópolis argárica más importante de la zona es la del Puente del Noy, la única de las del término de Almuñécar que fue excavada ya que las demás se conocen por hallazgos fortuitos y el material recuperado está descontextualizado arqueológicamente; allí, entre las sepulturas de una necrópolis fenicia, apareció una sepultura en cista argárica intacta excavada en la roca, hecha de lajas de pizarra, con el cadáver en posición fetal mirando hacia el norte y que contenía cuatro tulipas 54. Este descubrimiento, junto con los frecuentes hallazgos de fragmentos cerámicos en tumbas fenicias, ha hecho pensar a sus excavadores que en la colina donde se encontró habría habido una necrópolis del Bronce Pleno( argárica) destruida en su mayor parte por la erosión y por la construcción de la necrópolis fenicia 55.
En la zona de río Seco, en el cortijo del Tenorio, se encontró una necrópolis de cistas con un ajuar que contenía entre otros materiales una placa de arquero, elemento este más característico de la Edad del Cobre que revela el carácter arcaico de esta necrópolis. Según Molina Fajardo, podría representar un inicio de penetración desde la costa, que pondría en relación el área argárica de Almuñécar con la de Lentegí.
Para finalizar las referencias al municipio de Almuñécar, en La Herradura hay que mencionar la necrópolis del pago del Sapo, donde en los años cuarenta, al noreste de esta localidad y ya en la sierra, se encontró una extensa necrópolis de cistas 56.
Hacia el este de Motril encontramos toda una serie de enclaves del Bronce, en muchos casos asociados a yacimientos romanos y altomedievales. En Castell de Ferro se sitúan los yacimientos de La Rijana I, localizados a ambos lados de la N-340, donde se han detectado res-
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INTERIOR HISTORIA DE MOTRIL. pmd 78 05 / 01 / 2011, 10:22