Hatun Hillakuy 2008-Hatun Willakuy. Versión abreviada del Informe | Page 247

234 Franco pareció endurecer las posiciones del gobierno y del partido, y reforzó la opinión partidaria a favor de una guerra que comprometiera a toda la pobla- ción contra la subversión. Un mes más tarde otro dirigente, el subsecretario nacional de organización del PAP, Nelson Pozo, fue también abatido por miem- bros del PCP-SL. En este contexto, el gobierno buscó un acercamiento a las Fuerzas Armadas para restaurar los vínculos deteriorados por la creación del Ministerio de Defensa. Sin embargo, las Fuerzas Armadas ya habían optado por hacer su propia redefinición de la estrategia que desarrollaban en el conflic- to armado interno. Pronto aparecieron otras críticas al partido de gobierno relacionadas con el manejo del Ministerio del Interior. Tras el nombramiento del ministro Barsallo a ese despacho, se comenzó a denunciar el uso partidario del Ministerio, así como el inicio de operaciones paramilitares contra las organizaciones subversivas (como el frustrado atentado con explosivos contra el local de El Diario, atribuidas a personal vinculado al Ministerio del Interior). Barsallo reveló en una entrevista con la CVR la desconfianza en la que vivía el gobierno y su tensión con las Fuerzas Armadas. «[...] yo sabía dónde estaban todos los generales y comandantes generales del Ejército, de la Marina, Aviación. Lo sabía perfectamente porque era mi función, yo no iba a permitir que dieran un golpe de Estado. ¡Qué buena gracia!». La actuación del Presidente en un encuentro partidario contribuyó a aumen- tar el clima de tensión y desconfianza entre el gobierno y las Fuerzas Armadas. Buscando estimular a la juventud del partido —enfrentada a las dirigencias inter- medias—, García idealizó los rasgos de la militancia senderista para justificar la importancia del compromiso con el partido. En el discurso que dio al inaugurarse el VII Congreso Nacional de la Juventud Aprista, en mayo de 1988 el Presidente dijo: Y debemos reconocer cómo Sendero Luminoso tiene militantes activos, entrega- dos, sacrificados. Debemos reconocer algo que ellos tienen y nosotros no tenemos como partido [...] equivocado o no, criminal o no, el senderista tiene lo que noso- tros no tenemos: mística y entrega [...]. Esa es gente que merece nuestro respeto y mi personal admiración porque son, quiérase o no, militantes. Fanáticos les dicen. Yo creo que tienen mística y es parte de nuestra autocrítica, compañeros, saber reconocer que quien, subordinado o no, se entrega a la muerte, entrega la vida, tiene mística. 55 La toma de Juanjuí Aunque había anunciado en 1986 el fin de su «tregua» al gobierno y al PAP, la aparición de columnas guerrilleras del MRTA en San Martín en noviembre del año siguiente sorprendió a la policía. La Dirección de Operaciones Especiales de la policía se había creado recién tres meses antes y no estaba lista para entrar en acción. Después de conocida la toma de la ciudad de Juanjuí, el 6 de noviembre de 1987, la prensa cubrió ampliamente los sucesos. El presidente García pidió a los medios de comunicación «[...] asumir una gran responsabilidad, porque si se 55 Deseo. Resumen Semanal, 1-7 de julio de 1988, año XI, n.º 475, p. 1.