Hatun Hillakuy 2008-Hatun Willakuy. Versión abreviada del Informe | Page 205

192 Finalmente, en 1996, con la mayoría de los miembros y dirigentes del MRTA detenidos en diversos penales del país, este grupo subversivo llevó a cabo el que sería su último secuestro, con la intención de liberar a sus compañeros. En el período comprendido entre 1988 y 1995, el secuestro se configura como una práctica sistemática. E L SECUESTRO COMO PARTE DE UN PLAN Los secuestros entre 1984 y 1987 constituyeron una práctica frecuente orientada a la obtención de beneficios políticos y económicos, pero no parecen vincularse con un plan general. Sólo a partir de 1988 los secuestros empezaron a formar parte de la política del grupo subversivo. En dicho año, el MRTA no tenía suficientes fuentes de financiamiento para desarrollar sus acciones, por lo que en su Segundo Comité Central, realizado en 1988, decidió utilizar los secuestros como un medio para proveerse de recursos económicos: «[...] el MRTA debía acentuar su preparación política y militar porque vislumbrábamos el pase a una nueva etapa de la lucha de clases. Por consiguiente, elaboramos un plan que consistió en: [...] f. Conseguir un fondo de guerra a fin de resolver las necesidades que imponen las tareas partida- rias. Se empieza a trabajar la captura de una de las cabezas de los «12 apóstoles» 1 » (MRTA 1990: 127). De este modo, el grupo subversivo decidió iniciar la ejecución de su plan se- cuestrando a Carlos Ferreyros (1988) y a Héctor Delgado Parker (1989), ambos empresarios pudientes vinculados con el gobierno. Para ello, el MRTA inició la preparación de un grupo de miembros que tendrían a su cargo el desarrollo de estas acciones. Un ex militante del MRTA corrobora lo expuesto: En el año 1988 hubo épocas en la que andábamos misios, misios, cero de dinero, no había plata para nada. Y lo poco que se podía conseguir era dirigido a los sectores donde esta- ban las prioridades […] Ya se habían intentado los bancos, algunas financieras. No resul- taron, fue muy poco y también la modernidad atenta contra esto, ya nadie tiene casi plata en efectivo. La única forma es entrar a los secuestros. [Esta necesidad económica] lleva a los secuestros. Estaba en proceso y todo eso. Se pensó en un principio secuestros grandes, importantes, o sea, un par […] Se agarra a los dos, a las cabezas de los grupos económicos más importantes y puedes parar la olla. Se tuvo que armar todo un equipo especializado en eso, eso demoró más de un año. 2 Los años siguientes, la necesidad de obtener recursos económicos para mante- ner a su organización y proveerse de armamento, aseguraron la continuación de esta propuesta inicial, tal como lo afirmó un ex militante del MRTA: Cae Víctor Polay 3 y nosotros no teníamos fondos de guerra y ese día cae, ¿Te das cuenta? Hasta esas alturas estábamos bien, después estábamos un poquito arrancados. 1 2 3 «12 apóstoles» es la expresión utilizada por los medios de comunicación para denominar al grupo de empresarios más adinerados del país que mantenían una permanente rela- ción con miembros del gobierno. CVR. BDI-II-P461. Entrevista en profundidad, septiembre de 2002. Mando del MRTA, ex estudiante de la UNCP, preso en un penal de máxima seguridad. EL 3 de febrero de 1989, Víctor Polay Campos, jefe del MRTA, fue capturado en el Hotel de Turistas de Huancayo, Junín, sentenciado a 20 años de prisión y recluido en el penal Castro Castro.