GONG BO 2 TOMO DOS | Page 5

5

CINE PINK

El cine pink fue un momento exitoso a nivel mundial de la filmografía japonesa, cintas casi pornográficas (sexplotation) producidas por estudios independientes que pronto se volvieron millonarios. De aquí surgió la nueva ola del cine japonés, con cineastas que debutaron en este género primero y luego ya se dedicaron a otra cosa. Se trata de una corriente que evolucionó en el discurso de autor, del profeta de los inaceptables, usando la alienación como línea argumental, tocando las formas de vida alternativas a lo políticamente correcto. Nagisa Ōshima filmo más de 20 películas entre 1959 y 1999 que cuestionaban al statu quo.

ULTRAVIOLENCIA

Pronto aparecieron estilos en el cine japonés ultraviolentos, con subgéneros insólitos como el Guinea Pig, que resultan demasiado explícitos para cualquier nivel de sensibilidad. Faltas de trama en muchos casos, las historias son solo pretextos narrativos para sembrar praderas de sangre. A pesar de que este cine proviene de una notable insensibilización en el nuevo público, de un cine comercial que exigía más violencia para vender palomitas, de aquí también surgieron directores destacados, como Miike (Audition) y Sion Sono (El club del suicidio).