*(Foto) Miguel Barreto
D
esde el primer momento en que me ofrecieron la posibilidad de colaborar en Fútbol en Marcha (hecho que me halaga y me enorgullece enormemente), me dispuse a darle vueltas a la cabeza para ver de qué manera podía ser capaz de llamar la atención del lector y, al menos, hacerlo reflexionar sobre idea que pueda tener una persona inquieta y apasionada del deporte rey como yo. Debido a la relación existente entre la publicación de este primer número de la revista y el inicio de los entrenamientos y la liga para los equipos de fútbol base, considero que lo adecuado es ofrecer unas pinceladas sobre la pretemporada y sus mitos. ¿Cómo enfoco mis primeros entrenamientos: hacia la resistencia o hacia la fuerza? ¿Es mejor llenar los depósitos (como si los niños fueran coches) con trabajo aeróbico continuo para tener una base, o lo combino con cambios de ritmo? Sin duda, nuestro primer pensamiento cuando vamos a iniciar las sesiones de trabajo con el equipo va referido, principalmente, al aspecto condicional, elemento importante dentro del proceso de entrenamiento, pero imposible de separar de los otros ya conocidos (técnica, táctica, psicología).
Según nos comenta Paco Seirul-lo, preparador físico del FC Barcelona: “Hacer algo que no acontece en el juego es ridículo, por esto, no podemos pensar que el futbolista mejora su resistencia corriendo en la playa, sino que en todo caso mejorará su salud, ¡y la salud es buena! Y si estás en un gimnasio haciendo pesas, sucede lo mismo, no puedes decir que estás entrenando la fuerza para el fútbol: ¡es imposible trabajar la fuerza para el fútbol en un gimnasio!, ya que en un contexto tan complejo como es el juego del fútbol, no podemos mejorar obviando esta complejidad”. Entonces, ¿qué hacemos? Pues siento decirles que la receta mágica no existe, pero de lo que si se está seguro en todos los lugares del mundo es de que el balón es el único maestro de fútbol infalible, y de que el propio juego debe ser el conductor del aprendizaje del niño en toda su carrera como futuro deportista. A partir de ahí, debemos olvidarnos de las capacidades co ?X?[?[\?H??\]Yp?[??H??Y[??\?H[??\?[???[?^?\?[?H[?Y?X?X?p??0?X?X??0?X?X?HY\YHH\?YY\?H???Z?]??????]YH\?[[??[??[?[??
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