Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea SE PUEDE CONVERTIR EN ENERGÍA Y LA ENERGÍA EN POTENCIA ". Aplicada a un símbolo , tal como I , la expresión energética afirma que TODA DISMINUCIÓN DE LA ENERGÍA DURANTE LA EMERGENCIA DEBE REPUTARSE COMO UN AUMENTO DE SU " POTENCIA " PARA RECIBIR ENERGIA EQUIVALENTE .
Un símbolo emergente posee , pues , " potencia activa ", aunque en forma INVERSA a una Relación . La potencia activa de la Relación es POSITIVA , capaz de dotar por sí misma al símbolo de la energía suficiente para emerger : la energía del símbolo proviene de una manifestación actual de la potencia activa . En cambio , la potencia activa del símbolo emergente es NEGATIVA , producto de la disminución de energía que ha cedido a la esfera de sombra durante el tránsito hasta Ψ : la potencia activa negativa de un símbolo predispone a éste para TOMAR la energía faltante . Y es esa potencia , replegada en el símbolo emergente , la que lo impulsa a desarrollar un proceso entelequial y la que causa la transición energética de ( -Ep min .) a (+ Ep máx .).
Cuando el símbolo I se encuentra en el nivel exacto de Ψ , es decir , en el plano del umbral de conciencia , SU ENERGIA ES : CERO , Y SU POTENCIA : MÁXIMA . Al concluir la esfera de sombra desaparece la opacidad intrínseca y el símbolo deja de perder energía ; al penetrar en la esfera de luz su potencia lo predispone para TOMAR energía . ¿ De dónde la TOMA ? Respuesta : de la esfera de luz , vale decir , de la conciencia . Pero tal restitución de energía no se efectúa progresivamente , de manera análoga a la paulatina pérdida de energía experimentada en la esfera de sombra ; por el contrario , al atravesar el umbral de conciencia , el símbolo TOMA DE UNA SOLA VEZ TODA LA ENERGÍA QUE LE DEMANDA SU POTENCIA NEGATIVA : por eso toda representación consciente " APARECE " CON " CLARIDAD " ANTE EL SUJETO . Pero en esta " aparición " el símbolo dispone ahora de energía propia e intenta desplegar frente al sujeto aquello que lleva en germen tras la forma simbólica .
De la potencia con que un símbolo atraviese el umbral de conciencia depende la región de la esfera de luz en la que haya de manifestarse . El símbolo I ', por ejemplo , se estabiliza frente al sujeto consciente en el nivel Ψ ’ ( ver figura 21 ). El nivel de estabilización de toda representación consciente se alcanza en un solo movimiento que comienza en la estructura cultural ; en la figura 21 , esto significa que el símbolo I emerge desde el plano de significación hasta el nivel Ψ ’ EN UN SOLO MOVIMIENTO , progresivo hasta Ψ y brusco hasta Ψ ’: EN EL NIVEL DE ESTABILIZACION ACABA LA EMERGENCIA Y COMIENZA EL PROCESO .
La estabilidad de una representación es vivenciada por el sujeto como la " aparición " de la imagen , como un símbolo que de pronto emerge y se hace claro en la conciencia . Pero tal estabilidad no indica quietud , sino que señala sólo un cambio en la actividad del símbolo : a partir de allí comienza un proceso entelequial que puede enajenar completamente la atención del sujeto a menos de que éste disponga de suficiente energía , o sea : voluntad , como para contrarrestarlo .
En la segunda parte de estos " Fundamentos ", al estudiar la Ética Hiperbórea , será considerado de importancia capital , y en base a ello se desarrollará toda una tipología humana , el momento de la estabilización del símbolo en la conciencia . Por eso conviene anticipar ahora que al " aparecer " el símbolo frente al sujeto se establece entre ambos una TENSIÓN DRAMÁTICA ; en ese caso el pasú solo atina a reaccionar de una manera que le es característica . Sin embargo , tras el encadenamiento de los Espíritus Hiperbóreos , existen tres clases de hombres sobre la Tierra : el pasú , el virya y el Siddha . Particularmente el virya , que puede ser " perdido " o " despierto ", exhibe reacciones distintas a la del pasú . Una tipología basada en la actitud del sujeto consciente frente a un SÍMBOLO SAGRADO , que más adelante se definirá , es altamente reveladora sobre el grado de confusión estratégica que presentan los
134