Ciertamente, otra de las características fundamentales de la investigaciónacción es su preocupación tanto por el proceso como por el producto. Es decir, no
sólo se pretende a través del proceso mejorar la práctica, sino que se considera
que el camino a recorrer para conseguirlo es tan importante o más que el
resultado final.
El cambio es un proceso, no un producto (Kemrnis y McTaggart, 1988).
7.2.5.3. El Proceso de Investigación-Acción
Existen diversas formas de concebir el proceso de investigación-acción. Sin
embargo, la conceptualización más generalizada es entender dicho proceso como
una espiral sucesiva de ciclos constituidos por varios pasos o momentos. El
proceso de investigación-acción se caracteriza fundamentalmente por su carácter
cíclico, su flexibilidad e interactividad en todas las etapas o pasos del ciclo (Fig.
7.3). Este modelo de "espiral de ciclos" consta de cuatro etapas:
1) Clarificar y diagnosticar una situación problemática para la práctica.
2) Formular estrategias de acción para resolver el problema.
3) Poner en práctica y evaluar las estrategias de acción. Comprobar
hipótesis.
4) El resultado conduce a una nueva aclaración y diagnóstico de la situación
problemática, iniciándose así la siguiente espiral de reflexión y acción.
En líneas generales, los diversos modelos de cómo planificar y desarrollar
una investigación-acción siguen el modelo introducido por Kurt Lewin, aunque
cada uno incide de forma especial en determinados aspectos en función del
concepto de investigación-acción que subyace a ellos y de su aplicación concreta.
A modo de ejemplo, en la Figura 7.3 se presenta el modelo de investigaciónacción que recoge las aportaciones de Lewin y que ha sido revisado por Elliott.