El Paradigma Cualitativo en la Investigación Socio-Educativa
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creencias, de la persona que investiga, lo cual le da un sentido
subjetivo a lo observado.
Esta afirmación deja en suspenso las clásicas
polaridades de sujeto-objeto: abre de par en par la puerta a la
subjetividad.
Nos catapulta hacia un ser subjetivo, un ser persona,
que sólo se comprende en el estar o vivir con o al lado de las
otras personas que también poseen una matriz propia
constituida por valores, actitudes, intereses y creencias.
Matriz que a su vez está determinada o es construida a
lo largo de la historia de vida de cada quien. Pero, ¿Cómo se
relaciona esto con la investigación educativa? La respuesta a
esta inquietud hinca sus raíces en la matriz epistémica, es decir,
en el trasfondo cultural y existencial-vivencial del sujeto.
6.
Del supuesto de objetividad al de subjetividad
En la siguiente tabla comparativa sobre los paradigmas
de investigación educativa (ver página número 110), se
incluyen las tres dimensiones que están íntimamente
relacionadas con los supuestos de objetividad y subjetividad
que se desarrollan en esta sección. La relación sujeto-objeto y
las otras dos dimensiones: ontológica y axiológica que sustenta
el paradigma positivista y las, diametralmente opuestas, que
sustenta el paradigma cualitativo.
Sujeto y objeto son dos términos que están en
constante movimiento, oponiéndose, comprometiéndose,
separándose, modificándose en un movimiento que se inicia
por la voluntad del sujeto que desea el conocimiento, pero que
en realidad continúa repetidamente, hasta que aquel adquiere
un conocimiento cada vez más completo y profundo sobre el