Formula Rally Magazine nº9 - Julio 2016 | Page 99

Por una parte Grönholm perdió todas sus opciones por una racha de salidas de carretera y roturas, Burns, con opciones casi hasta el final, comenzó a sufrir los primeros síntomas de la enfermedad por la que nos acabó dejando y no pudo acabar la temporada, Rovanperä no daba una a derechas y Panizzi, que fue el único que acabó la temporada de una manera digna y consiguiendo ganar en España, no era un piloto con opciones de título, todo ello sumado a que el 206 estaba en la fase final de su desarrollo, por lo que sus prestaciones fueron cayendo frente al resto de equipos. Curiosamente, el piloto que parecía aportar un pequeño rayo de luz a esta situación era otro viejo conocido, repescado en la última carrera para suplir al malogrado Burns: Freddy Loix. El belga, que mantenía buenas relaciones con Marlboro, se aseguró un volante en la marca francesa para el 2004 tras haber abandonado Hyundai el Mundial. Así que tras haber perdido un Mundial muy bien encauzado desde principios de año, se pasaba a la temporada 2004 con un cambio de coche: el 307 CC WRC, una montura muy distinta a lo convencional y que traía muchas soluciones innovadoras. No comenzó mal el año si se piensa que el 307 era un coche nuevo y poco rodado, so- bretodo cuando Grönholm conseguía estar en tiempos de cabeza, pero las primeras cabezas empezaron a rodar ya tras la segunda carrera, cuando Loix, a pesar de las buenas maneras mostradas a finales de 2003 no daba muestras de ser lo que se prometía, siendo apartado del segundo coche. A partir de ahí, y con Harri Rovanperä, Daniel Carlsson, Cedric Robert y Loix repartiéndose las funciones de segundo piloto, las cosas no fueron del todo bien, siendo Gronhölm el mejor de sus pilotos a final de año con un quinto puesto en la general y Peugeot como constructor cuarta sólo por delante de una flojísima Mitsubishi. Para 2005 había cambios en la reglamentación en cuanto a medidas de los coches, y esto podría dar alas a los Peugeot, que con un segundo piloto de garantías, Markko Märtin, y Pirelli como nuevo suministrador de neumáticos, podrían volver a llevar a Marlboro a los puestos por los que había llegado a un acuerdo con Peugeot. 99