Entre la enorme variedad de recetas que convierten a la cocina española, pocas pueden ser consideradas comunes a todas las regiones o a casi todo el territorio, aunque algunos tienen un origen conocido y siguen siendo asociados con lugares particulares. Se pueden citar como ejemplos la tortilla de patata, el gazpacho, los embutidos (jamón serrano, chorizo, morcilla) y quesos.
La masa por ejemplo no es un ingrediente muy utilizado por los cocineros y en los restaurantes españoles no se ve mucho ese tipo de comida. Por otro lado, a los españoles les gustan las ensaladas, principalmente en el verano.
Son bastante comunes los platos que contienen garbanzos y/o las lentejas. También los cocidos son muy apreciados por aquellos que visitan el país.
Con respecto a los postres podemos decir que los más típicos en España son los pasteles, las natillas, las magdalenas y los churros. Los churros suele servir acompañado de una taza de chocolate caliente y donde se puede (o debe) mojar el churro antes de comer. Es fenomenal! Una de nuestras escritoras demostró y probó personalmente!
Sin duda que nuestra investigación no quedaría completa sin hablar de las bebidas; el vino y la cerveza (más conocida por caña) son las bebidas preferidas de los españoles para seguir con la comida. También la sidra es muy apreciada todavía para después de la comida y que se suele llamar “chupito”.
Los almuerzos y las cenas son hechos muy tarde porque así es la cultura española.
La comida española es una de las más diversas del mundo. Los platos más populares de España son: la paella, las tapas, el jamón, el pan con tomate y los cozidos.