En Redes Ceilac En Redes Ceilac No 5 | Page 22

Depósito legal AR2017000223 Número 10065 En Redes Ceilac Año 3. No. 1 Junio, 2019 Para Flòrez (1999), la didáctica “es un capítulo de la pedagogía, el más instrumental y operativo pues se refiere a las metodologías de enseñanza, al conjunto de métodos de enseñanza, al conjunto de métodos y técnicas que permiten enseñar con eficacia” (pag.12), alude el autor que la didáctica no debe entenderse como un conjunto de técnicas comunicativas aisladas de los principios que caracterizan a cada teoría pedagógica, ya que cada teoría propone una didáctica diferente. Por su parte Lacueva (2008), afirma que “el quehacer didáctico no puede limitarse (y de hecho no se limita) a lo que la teoría pedagógica ofrezca” (p 46), tal afirmación se desprende de la condición de insuficiencia de las teorías pedagógicas, sino también por los aspectos disimiles de los niveles teórico pedagógico-didáctico-práctica concreta. Sevillano (2004), expresa que “Hoy día la didáctica supera con creces sus denotaciones etimológicas iníciales relativas al arte de enseñar” (p. 85), además afirma la didáctica debe estar dirigida hacia ocuparse y preocuparse por el aprendizaje dándole un papel protagónico al estudiante, y el docente pasaría a ser mediador del aprendizaje donde la aplicación de las estrategias metodológicas se constituye en el núcleo de la práctica pedagógica en correspondencia a la naturaleza del contenido, haciendo énfasis en la necesidad de considerar la interdisciplinariedad en la práctica pedagógica. Considerando lo expuesto anteriormente es fácil comprensión que la didáctica como ciencia debe adaptarse al ritmo que impone la avalancha globalizadora, ya que desde el punto de vista educativo han surgido muchas propuestas para preparar a las futuras generaciones a enfrentar los continuos retos que se avecinan, adaptar las prácticas educativas a los nuevos tiempos donde las instituciones educativas sean capaz de desarrollar practicas pedagógicas con pertinencia social, donde las vivencias sean el principal motor que mueva la integración y la construcción del conocimiento, en tal sentido Lovera y Agudelo (2010), definen la didáctica integradora como “una disciplina pedagógica de carácter práctico y normativo, es la praxis de la praxis educativa, es la aplicación de la experiencia y del conocimiento en la acción y la renovación pedagógica”(p.50), en tal sentido la renovación pedagógica debe emerger del pensamiento crítico, reflexivo y practico de los actores educativos. Es obvio que la educación de estos tiempos ha introducido una serie de cambios determinantes en la práctica pedagógica y por ende en el proceso enseñanza aprendizaje, al respecto Huertas (2008), afirma que “la educación recae en la praxis del docente, único responsable de la conducción curricular del aprendizaje” (p. 67), lo cual deja ver claramente que el docente que las situaciones o experiencias de aprendizajes del estudiante depende directamente del docente el cual debe orientar su práctica pedagógica hacia la consolidación de habilidades, saberes y actitud en el estudiante, aspectos que conducen a nuevos conocimientos. La Planificación Integradora en el Aula: Bitácora Innovadora de la Enseñanza Con el surgimiento de las teorías del aprendizaje de Piaget, Vigotsky, Brunner y Ausubel, enmarcadas en el constructivismo se sentaron las bases para darle otra dimensión a la práctica pedagógica desde una perspectiva que propone la integración de los conocimientos. En base a esto Woolfolk (2004) expresa que la planificación integradora persigue crear un ambiente de aprendizaje que permita al estudiante alcanzar las metas respetando sus intereses y habilidades personales, en tal sentido debe estar dirigido a que” se identifiquen las ideas, los temas y los aspectos que brinden la profundidad y variedad de perspectivas que ayuden a que los estudiantes adquieran un aprendizaje significativo” (p.438) Para el docente la planificación es la brújula que orienta su trabajo en el aula, es la que determina su práctica pedagógica, el modo de desarrollar los contenidos o unidades de aprendizaje. No obstante, para nadie es un secreto que, por muchos años la organización del saber, es decir, las formas de seleccionar y organizar contenidos de aprendizajes han tenido clara dependencia de la lógica formal y de la estructura disciplinar, donde se evidencia el predominio de contenidos compartimentados centrados exclusivamente en una disciplina. En la actualidad esta forma de organización se ha visto confrontada con propuestas que rompen con esa tendencia e intentan establecer relaciones entre contenidos de diversas disciplinas. Emergen así las formas multidisciplinares, pluridisciplinares, interdisciplinares, entre otras, donde la característica de cada una de estas modalidades está determinada por el tipo de relación que se establece entre las distintas áreas y el número de disciplinas que intervienen en esta relación. Recibido Aceptado Páginas Febrero, 2019 Mayo, 2019 6 Para el docente la planificación es la brújula que orienta su trabajo en el aula, es la que determina su práctica pedagógica, el modo de desarrollar los contenidos o unidades de aprendizaje. No obstante, para nadie es un secreto que, por muchos años la organización del saber, es decir, las formas de seleccionar y organizar contenidos de aprendizajes han tenido clara dependencia de la lógica formal y de la estructura disciplinar, donde se evidencia el predominio de contenidos compartimentados centrados exclusivamente en una disciplina. En la actualidad esta forma de organización se ha visto confrontada con propuestas que rompen con esa tendencia e intentan establecer relaciones entre contenidos de diversas disciplinas. Emergen así las formas multidisciplinares, pluridisciplinares, interdisciplinares, entre otras, donde la característica de cada una de estas modalidades está determinada por el tipo de relación que se establece entre las distintas áreas y el número de disciplinas que intervienen en esta relación. Sin duda alguna, la integración de las diversas disciplinas independientemente de la modalidad asumida da cuenta de que la realidad tiene variadas dimensiones, es por ello que en el Currículo Básico Nacional se asume como modalidades de organización de los contenidos la inter y transdisciplinariedad. Este nuevo enfoque se constituye para el docente en una ardua tarea dada la naturaleza particular de cada área, las cuales se rigen por un lenguaje y metodología que corresponden a un escenario de acción y objeto de estudio específico, lo que se traduce en una invitación al docente a dejar aflorar sus habilidades didácticas para lograr organizar las estrategias de enseñanza y cumplir con el enfoque integracionista experimentado en la actualidad en nuestro sistema educativo. Cabe destacar que las habilidades didácticas del docente deben estar orientadas a presentar al estudiante los contenidos de manera organizada, para lograr bajo esta nueva concepción que el estudiante a través de las experiencias de aprendizaje social, logre establecer la conexión con la realidad o aproximarse a ella, lo que beneficiaria el desarrollo de los conocimientos, habilidades, destrezas, actitudes y valores que la sociedad y el sistema educativo hayan planteado como aceptables, es por ello que las estrategias didácticas seleccionadas por el docente no solo deben despertar el interés del estudiante en relación a la importancia de su desarrollo cognitivo sino también a estar consciente de que el conocimiento no es fijo, sino que está en cambio permanente. En base a lo antes descrito y como punto de reflexión, la forma como se está llevando a cabo el proceso enseñanza-aprendizaje en el nivel de Educación Media General debe ser objeto de profundo análisis por parte del docente quien tiene uno de los roles protagónicos como lo es la labor formativa del estudiante, el análisis debe hacerse tomando en cuenta las debilidades que desde la perspectiva pedagógica representan un nudo crítico para el desarrollo del acto educativo, el cual muchas veces carece de elementos que despierten el interés del estudiante en el aula, interés que no solo le sirve para adquirir o apropiarse de nuevos conocimientos sino también la importancia de su aplicación más allá del aula de clases. Estrategias Didácticas Integradoras: Orientadoras de la Acción Educativa Dentro de la planificación hay un elemento de suma importancia que lo constituyen las estrategias, las cuales se convierten en el aliado principal del docente al momento de abordar el acto educativo, las estrategias son las que dictan las pautas para orientar su práctica en el aula de manera sistemática para facilitar el aprendizaje las cuales pueden definirse como el conjunto de procedimientos utilizados por maestros y directivos para promover cambios, innovaciones o aprendizajes significativos tanto en el aula como en la escuela es innegable que las estrategias son un unos de los componentes principales que determinan la calidad del proceso educativo en relación a las formas utilizadas para organizar y presentar los contenidos de aprendizaje. Para Sevillano (2004), las estrategias didácticas deben estar orientadas a concebir la escuela como un lugar de cambio que apunte hacia la mejora del rendimiento de los alumnos y al desarrollo profesional de los docentes en búsqueda de la optimización de la escuela, donde el desarrollo de cada estrategia englobe una concepción nueva o distinta del proceso educativo. Al respecto Nogales (2002), sostiene que las estrategias representan “ El conjunto de métodos, técnicas y recursos que utiliza el docente diariamente en el aula para explicar, hacer, comprender, motivar, estimular y mejorar el proceso de aprendizaje”, de esta manera las estrategias se erigen como el factor principal para lograr en el estudiante el desarrollo del pensamiento. Por consiguiente, Lovera y Agudelo (2010) presentan las siguientes estrategias didácticas integradoras: 22