panfleto del político por el que deben votar, y entonces no solo pierde el mejor candidato, sino que nos termina dirigiendo el tramposo.
Según Oscar Avellano, profesor de Sociales de un colegio de Bogotá, es un hecho que los jóvenes de estas generaciones se están interesando mucho más por la política respecto a las anteriores, y con mucha seguridad afirma que si sus estudiantes tuvieran la oportunidad de votar, al menos el 80% participaría.
Finalmente, y como dijo el Profesor Erick, “La tarea fuerte es lograr que dejen de lado la desesperanza con respecto a la política y que la vean como una oportunidad de sacar esto adelante”. Muchas personas asocian la política con todo lo malo que sucede en el mundo, pero es al mismo tiempo, el método que puede conseguir que las cosas
mejoren. Es posible que la generación actual no tenga muchas oportunidades de ver un cambio en el corto plazo, la esperanza está puesta en esos jóvenes que hoy piensan en lanzarse a la Personería estudiantil, en esos que buscan ser cabildantes, en quienes dan discursos en la ONU para que el resto del mundo se detenga y escuche por un momento lo que tiene por decir; es por eso que las cosas se deben hacer bien desde el comienzo, el ejemplo debe ser el apropiado, y debemos reconocer las falencias como miembros activos de la sociedad, para que el escepticismo que ya posee a tantas personas, no llegue a quienes son la esperanza del mañana.
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