ELEVANGELIO DE LOS ESENIOS | Page 7

sánanos para que también nosotros podamos ser fuertes y no haya necesidad de habitar en nuestra miseria. Sabemos que tienes el poder de sanar toda clase de enfermedades. Líbranos de Satanás y de todas sus grandes aflicciones. Y Jesús contestó: Felices vosotros que tenéis hambre de la verdad, que yo os satisfaré con el pan de la sabiduría. Felices vosotros que tocáis, porque yo os abriré la puerta de la vida. Felices vosotros que arrojareis el poder de Satán, porque yo os conduciré al reino de los ángeles de nuestra Madre, donde el poder de Satanás no puede penetrar. ¿Quién es nuestra Madre y quiénes sus ángeles? ¿Y dónde está su reino? Le preguntaron muy atónitos. Vuestra Madre está en vos y vos en Ella. Ella os parió. Ella os da la vida. Fue nuestra Madre, quien os dio vuestro cuerpo y a Ella, algún día se lo devolveréis. Felices vosotros cuando la conozcáis, así como a su reino, si recibís los ángeles de vuestra Madre y si observáis sus leyes. De cierto os digo; el que hace estas cosas jamás verá enfermedad. Porque el poder de vuestra Madre, es superior a todo. Y este poder destruye a Satanás y a su reino. Y tiene dominio sobre vuestros cuerpos y sobre toda cosa viviente. CAPITULO II. La sangre que circula en nosotros es nacida de la sangre de nuestra Madre Tierra. Su sangre cae de las nubes, brota de las entrañas de la tierra; susurra en los arroyos de las montañas. Corre extendiéndose en los ríos