Y Jesús les enseñaba diciendo: En verdad, en verdad os digo, nadie puede ver
el Reino de los Cielos, excepto el que vuelve a nacer. Y un hombre le dijo:
¿Cómo puede un hombre viejo volver a nacer? ¿Puede entrar por segunda vez
en el vientre de su madre y nacer?
Y Jesús le dijo: En verdad os digo, sólo el hombre que nace de la Madre Tierra y
del Padre Celestial y camina con los ángeles del día y de la noche, puede entrar
al Reino Eterno. El que nace a la carne, carne es y el que nace al espíritu,
espíritu es. La carne de tu cuerpo nace de la Madre Tierra y tu espíritu interno
nace del Padre Celestial.
Donde el viento sopla se le escucha y se oye el sonido, pero no se puede decir
de donde viene. Así mismo es con la Sagrada Ley. Todos los hombres la oyen,
pero no la en Y[